El calor y la alcalinidad podrían no solo ser aceptables, sino necesarios para comenzar la vida
Al crear protocélulas en agua de mar alcalina y caliente, un equipo de investigación dirigido por la University College London (UCL) ha agregado evidencia de que el origen de la vida podría haber sido en respiraderos hidrotermales de aguas profundas en lugar de en charcas poco profundas.
Experimentos anteriores no habían logrado fomentar en tales entornos la formación de protocélulas, vistas como un trampolín clave para el desarrollo de la vida basada en células, pero el nuevo estudio, publicado en Nature Ecology & Evolution, encuentra que el calor y la alcalinidad podrían no solo ser aceptables, sino necesarios para comenzar la vida.