
Moléculas invisibles a los ojos sin esenciales para la vida allí donde nunca llega la luz del sol
Un equipo de investigación dirigido por el Occidental College ha identificado una simbiosis hasta ahora desconocida: arañas de aguas profundas que cultivan y se alimentan de bacterias que oxidan el metano.
Se descubrió que tres especies no descritas de arañas marinas Sericosura albergan en sus exoesqueletos densas capas de microbios que consumen metano y metanol. Estos microbios no solo prosperan allí, sino que también sirven como su principal fuente de nutrición.