Se revela una clave sorprendente en la vida de nuestros océanos
La Crocosphaera watsonii puede convertir el gas nitrógeno en nitrógeno orgánico
En el vasto océano, donde un nutriente esencial, el hierro, es escaso, una bacteria marina que inicia la cadena alimentaria del océano sobrevive mediante un notable truco bioquímicos: recicla el hierro.Durante el día, utiliza hierro en enzimas para la fotosíntesis y fabricar hidratos de carbono, y luego por la noche, parece volver a utilizar el mismo hierro en diferentes enzimas para producir nitrógeno orgánico para las proteínas.
La bacteria, Crocosphaera watsonii, es uno de los pocos microbios marinos que pueden convertir el gas nitrógeno en nitrógeno orgánico, que (al igual que hace en la tierra) actúa como fertilizante para estimular el crecimiento de las plantas en el océano. Por lo tanto la productividad de los océanos está limitada por nitrógeno, que a su vez está limitada por los suministros escasos de hierro para las enzimas necesarias para producir nitrógeno orgánico.