
Tienen sistemas nerviosos segmentados que les otorga un control preciso en los ocho brazos
Los brazos del pulpo se mueven con increíble destreza, doblándose, retorciéndose y enroscándose con grados casi infinitos de libertad.
Una nueva investigación de la Universidad de Chicago reveló que el circuito del sistema nervioso que controla el movimiento de los brazos de los pulpos está segmentado, lo que otorga a estas extraordinarias criaturas un control preciso en los ocho brazos y cientos de ventosas para explorar su entorno, agarrar objetos y capturar presas.