Una neurohormona regula el desprendimiento de los brazos
Investigadores de la Universidad Queen Mary de Londres han hecho un descubrimiento sobre cómo las estrellas de mar logran sobrevivir a los ataques depredadores desprendiéndose de sus propias extremidades. El equipo ha identificado una neurohormona responsable de desencadenar esta notable hazaña de autoconservación.