En un litro de agua de mar hay diez mil millones de virus y mil millones de bacterias
Cuando los seres humanos cambian la química del mar, le toca a los organismos muy pequeños limpiar después de nosotros. La pregunta es si pueden hacerlo frente.
Una vez creímos que el mar era interminable y no era afectado por la actividad humana. Eso fue antes de que nos diéramos cuenta de que, por ejemplo, el Mar Báltico está lleno de fertilizantes de la agricultura que se arrastran con las lluvias de invierno. O que todos los embalses retienen minerales de silicato de los ríos que de otro modo habrían desembocado en el mar, donde las diatomeas podrían haberlos utilizado para construir sus conchas. O que nuestras emisiones de CO2 son absorbidas por el mar y bajan el pH. O que los derrames de petróleo pueden poner en peligro tanto a peces como a aves marinas.