El nitrógeno es una parte clave de la transición de la no vida a la vida
La evolución es la explicación generalmente aceptada de cómo se volvió tan compleja la vida en la Tierra pero, en primer lugar, hay una cosa que no se puede explicar: cómo surgió la vida de la materia no viva.
La hipótesis prevaleciente es que la vida se inició en el océano, donde los respiraderos hidrotermales proporcionaronhidrotermales proporcionaron las reacciones químicas correctas. Pero un nuevo estudio del MIT ha encontrado que los antiguos océanos probablemente no tenían suficiente nitrógeno, pero charcas poco profundas podrían haberlo tenido.
Se suele atribuir al nitrógeno como una parte clave de la transición de la no vida a la vida. La historia cuenta que cuando se mezclaron los óxidos nitrogenados y el ARN primitivo, el ARN se indujo químicamente para comenzar a formar los primeros aminoácidos, que luego se convirtieron en los primeros organismos simples. Se cree que estos óxidos nitrogenados habrían llovido sobre la superficie después que cayeran rayos sobre los enlaces de nitrógeno en la atmósfera.
Pero, de acuerdo con el nuevo estudio, los óxidos nitrogenados probablemente no habrían durado lo suficiente como para alcanzar los respiraderos hidrotermales de aguas profundas y, en última instancia, dar inicio a la vida.
El equipo encontró dos factores que anteriormente se habían pasado por alto y que descomponían los óxidos nitrogenados en el agua: la luz ultravioleta del Sol y el hierro disuelto de las rocas.
"Demostramos que si incluyes estos dos nuevos factores en los que la gente no había pensado antes, se suprimen las concentraciones de óxidos nitrogenados en el océano en un factor de 1.000, en relación con lo que la gente había calculado antes", dice Sukrit Ranjan, autor principal del estudio.
Entonces, si los océanos no tenían suficiente nitrógeno en un solo lugar, ¿dónde comenzó la vida? Según el equipo del MIT, las charcas poco profundas son las mejores candidatas.
Debido a que simplemente hay menos volumen para que se diluyan los compuestos, en estas charcas podrían acumularse concentraciones más altas de óxidos nitrogenados, lo que les brinda una mejor oportunidad de interactuar con moléculas como el ARN.
"Nuestro mensaje general es que, si crees que el origen de la vida requería fijar nitrógeno, como hacen muchas personas, entonces es difícil que el origen de la vida suceda en el océano", dice Ranjan. "Es mucho más fácil que eso suceda en una charca. Estos estanques podrían haber tenido una profundidad de 10 a 100 cm, con un área de superficie de decenas de metros cuadrados o más".
La idea de que la vida no surgió en las profundidades del océano no es un cambio de juego completo: antes se ha planteado muchas veces la hipótesis de que la vida pudiera haberse iniciado en charcas poco profundas o en fuentes termales.
Los investigadores admiten que el último estudio no resuelve el debate, pero proporciona una nueva e intrigante evidencia para influir en el argumento de la vida que surge de un tazón de sopa primordial poco profundo.
La investigación fue publicada en la revista Geochemistry, Geophysics, Geosystems: Nitrogen Oxide Concentrations in Natural Waters on Early Earth