Cambian rápidamente de su estrategia de alimentación según su experiencia
Cuando la sepia sabe que los camarones, su comida favorita, estarán disponibles por la noche, comen menos cangrejos durante el día. Esta capacidad para tomar decisiones basadas en expectativas futuras revela complejas habilidades cognitivas.
"Fue sorprendente ver cuán rápido adaptaron las sepias su comportamiento alimenticio: en solo unos días supieron si era probable que hubiera camarones en la noche o no. Este es un comportamiento muy complejo y solo es posible porque tienen un sofisticado cerebro", dijo Pauline Billard, estudiante de doctorado en el Departamento de Psicología de la Universidad de Cambridge y Unicaen, Francia, y primera autora del informe.
El comportamiento de búsqueda de comida de las sepias se puede describir como selectivo u oportunista. Observando la sepia común europea, Sepia officinalis, cuando los investigadores proporcionaron de manera confiable un camarón cada noche, la sepia se volvió más selectiva durante el día y comió significativamente menos cangrejos. Pero cuando se les proporcionó camarones por la noche al azar, la sepia se volvió oportunista y comió más cangrejos durante el día.
La provisión aleatoria de camarones al atardecer significaba que la sepia no podía predecir si su comida favorita estaría disponible todos los días para la cena, por lo que se aseguraron de que tenían suficiente para comer más temprano en el día. Cuando cambiaron las condiciones, la sepia cambió su estrategia de búsqueda de alimento para que coincidiera.
Los investigadores vieron a los animales cambiar rápidamente de una estrategia de alimentación a otra según su experiencia. Al aprender y recordar los patrones de disponibilidad de alimentos, las sepias optimizan su actividad de alimentación no solo para garantizar que comen lo suficiente, sino también para asegurarse de que comen más de los alimentos que prefieren.
Las sepias comen una amplia variedad de alimentos, incluidos cangrejos, peces y calamares, dependiendo de lo que esté disponible. A pesar de una dieta tan generalizada, muestran fuertes preferencias alimentarias. Para probar esto, los investigadores observaron veintinueve sepias cinco veces al día, durante cinco días, colocando al mismo tiempo el cangrejo y los camarones a la misma distancia de las sepias y observando qué comían primero. Todas mostraron preferencia por los camarones.
Los animales deben adaptarse constantemente a los cambios en su entorno para sobrevivir. Las sepias eclosionan con un gran sistema nervioso central, lo que les permite aprender desde una edad temprana. Son capaces de recordar cosas que sucedieron en el pasado y de utilizar esta información para ajustar su comportamiento en previsión del futuro.
Las sepias son un tipo de cefalópodo. En términos evolutivos, los cefalópodos y los vertebrados divergieron hace unos 550 millones de años, sin embargo, son notablemente similares en la organización de sus sistemas nerviosos.
"Esta estrategia de alimentación flexible muestra que la sepia puede adaptarse rápidamente a los cambios en su entorno utilizando experiencia previa", dijo la profesora Nicola Clayton en el Departamento de Psicología de la Universidad de Cambridge, quien dirigió el estudio. "Este descubrimiento podría proporcionar una valiosa información sobre los orígenes evolutivos de una capacidad cognitiva tan compleja".
El estudio se publica en Biology Letters: Cuttlefish show flexible and future-dependent foraging cognition