Youti yuanshi tiene sus órganos internos conservados en una calidad excepcional
Un nuevo estudio dirigido por investigadores de la Universidad de Durham ha descubierto un fósil increíblemente raro y detallado, llamado Youti yuanshi, que permite echar un vistazo al interior de uno de los primeros antepasados de los insectos, arañas, cangrejos y ciempiés modernos.
Este fósil data de hace más de 520 millones de años, en el período Cámbrico, cuando comenzaron a evolucionar los principales grupos animales que conocemos hoy.
Este fósil pertenece a un grupo llamado euartrópodos, que incluye a los insectos, arañas y cangrejos modernos. Lo que hace que este fósil sea tan especial es que la diminuta larva, no más grande que una semilla de amapola, tiene sus órganos internos conservados en una calidad excepcional.
Utilizando avanzadas técnicas de escaneo de tomografía de rayos X de sincrotrón en Diamond Light Source, la instalación científica de sincrotrón nacional del Reino Unido, los investigadores generaron imágenes en 3D de regiones cerebrales en miniatura, glándulas digestivas, un primitivo sistema circulatorio e incluso rastros de los nervios que irrigan las simples patas y ojos de la larva.
Este fósil permite a los investigadores observar bajo la piel de uno de los primeros antepasados de los artrópodos. El nivel de complejidad de la anatomía muestra que estos primeros parientes de los artrópodos eran mucho más avanzados de lo que creían los investigadores.
Imagen derecha: Anatomía interna del gusano marino Youti yuanshi. Crédito: Universidad de Durham
"Cuando fantaseaba con el fósil que más me gustaría descubrir, siempre pensaba en una larva de artrópodo, porque los datos de desarrollo son fundamentales para comprender su evolución", dijo el investigador principal, el Dr. Martin Smith de la Universidad de Durham.
"Pero las larvas son tan pequeñas y frágiles que las posibilidades de encontrar una fosilizada son prácticamente nulas... ¡o eso creía! Yo ya sabía que este simple fósil con forma de gusano era algo especial, pero cuando vi las asombrosas estructuras preservadas debajo de su piel, me quedé con la boca abierta: ¿Cómo pudieron estas intrincadas características haber evitado la descomposición y seguir aquí para verlas 500 millones de años después?
La coautora del estudio, la Dra. Katherine Dobson de la Universidad de Strathclyde, dijo: "Siempre es interesante ver qué hay dentro de una muestra usando imágenes 3D, pero en esta increíble y diminuta larva, la fosilización natural ha logrado una conservación casi perfecta".
El estudio de esta antigua larva proporciona pistas clave sobre los pasos evolutivos necesarios para que simples criaturas parecidas a gusanos se transformaran en el sofisticado plan corporal de los artrópodos, con extremidades, ojos y cerebros especializados.
Imagen derecha: Micrografía electrónica del gusano marino Youti yuanshi. Crédito: Universidad de Durham
Por ejemplo, el fósil revela una ancestral región cerebral llamada 'protocerebro' que más tarde formaría el núcleo de la cabeza segmentada y especializada del artrópodo, con sus diversos apéndices, como antenas, piezas bucales y ojos.
Esta cabeza compleja permitió a los artrópodos adoptar una amplia gama de estilos de vida y convertirse en los organismos dominantes en los océanos del Cámbrico.
Detalles como estos también ayudan a rastrear cómo los artrópodos modernos adquirieron su increíble complejidad y diversidad anatómica y llegaron a ser el grupo de animales más abundante en la actualidad.
Los investigadores señalan que el fósil llena un importante vacío en nuestra comprensión de cómo se originó el plan corporal de los artrópodos y cómo se volvió tan exitoso durante la Explosión Cámbrica de la vida.
Este notable espécimen se encuentra en la Universidad de Yunnan en China, donde fue descubierto originalmente.
El estudio se ha publicado en la revista Nature: Organ systems of a Cambrian euarthropod larva