El mosasaurio Globidens alabamaensis, tenía extraños dientes en forma de hongo para aplastar a sus presas
Se han descubierto en Texas fósiles de un enorme y raro mosasaurio con dientes globulares gigantes, según revela un nuevo estudio.
Los dos fragmentos de mandíbula de un adulto nos permiten conocer el estilo de vida de Globidens alabamaensis, que pudo haber alcanzado longitudes de hasta 6 metros. Los dientes romos que recubren las mandíbulas demuestran la fuerza bruta que ejercían los mosasaurios sobre sus presas.
"Estas estructuras con forma de hongo son ideales para los ataques por impacto, para aplastar caparazones. Si algo se escapa y lo rompes, no pasa nada", dijo Bethany Burke Franklin, paleontóloga marina y educadora del museo de fósiles Texas Through Time en Hillsboro. Franklin, que se especializa en reptiles marinos, no participó en el estudio.
Durante el período Cretácico Superior (hace 100,5 millones a 66 millones de años), muchos emblemáticos depredadores marinos, como los ictiosaurios similares a delfines y los plesiosaurios de cuello largo, sucumbieron al cambio climático y a las consiguientes alteraciones del ecosistema marino.
Los mosasaurios se convirtieron en los depredadores dominantes en los mares poco profundos de la época, ocupando nichos que antes ocupaban sus predecesores más conocidos. Estos reptiles se diversificaron rápidamente y ocuparon múltiples nichos en un entorno volátil y rico en presas.
Globidens fue descubierto en 1912, pero solo se han desenterrado unos pocos ejemplares casi completos de este mosasaurio. La mayor parte de la evidencia fósil consiste en dientes y pequeños fragmentos de mandíbula. Desde entonces se han descrito otras cuatro especies de Globidens.
Mientras que la mayoría de los mosasaurios contaban con una formidable variedad de dientes en forma de daga, los Globidens desarrollaron dientes romos y redondeados que eran adecuados para aplastar los caparazones de tortugas, amonites y bivalvos. La vía marítima interior occidental, que dividió en dos lo que hoy es América del Norte durante el Cretácico tardío, habría proporcionado a G. alabamaensis una amplia variedad de presas con concha.
Imagen: Los dientes globulares del mosasaurio eran perfectos para triturar caparazones. (Crédito de la imagen: Trevor Rempert)
Los fragmentos fueron descubiertos en 2023 por un cazador de fósiles privado en la Formación Ozan en el noreste de Texas. El yacimiento en el que se encontraron data de la época Campaniense (hace entre 83,6 y 72,1 millones de años) y tiene un espesor de apenas 20 centímetros. No obstante, ha resultado ser rico en fósiles, incluidos otros mosasaurios.
La conservación de una parte de la cabeza del animal es emocionante, dijo Franklin. "El material craneal tiende a aplastarse más, especialmente en estos estratos más delgados", explicó.
Una de las mandíbulas todavía tiene 12 dientes, mientras que la otra solo conserva seis. Los dientes miden alrededor de una pulgada de largo y son redondeados, perfectamente diseñados para triturar las duras conchas de los moluscos. En una mandíbula, queda un diente germinal debajo de la encía, que habría surgido más tarde para llenar un hueco. Los científicos creen que, al igual que los tiburones, los mosasaurios se desprendían de sus dientes y los reemplazaban a lo largo de su vida.
Imagen derecha: Vista lingual del maxilar derecho mostrando el diente germinal en la posición del séptimo diente.
Gracias a estos dientes únicos, pudieron coexistir junto a otros grandes mosasaurios que perseguían diferentes tipos de presas, dijo Franklin.
"La adaptación probablemente estuvo influenciada por una sobreabundancia de cefalópodos", explicó. "Podían coexistir varias especies porque no consumían los mismos recursos. Los mosasaurios eran unos de los depredadores de más rápida evolución de la época. Llenaron nichos que habían dejado otros grandes depredadores marinos: había enormes abismos en la red alimentaria".
Los investigadores describieron el descubrimiento de los dos huesos maxilares en un artículo publicado el 14 de agosto en el Journal of Paleontological Sciences: New remains of the mosasaur Globidens alabamaensis from the North Sulphur River of Texas