El Atopodentatus unicus tenía una boca en forma de cabeza de martillo
En 2014 los científicos descubrieron un extraño fósil de un reptil marino del tamaño de un cocodrilo que vivió hace 242 millones de años en lo que hoy es el sur de China. Su cabeza estaba mal conservada, pero parecía tener un pico similar a de los pelícanos. Sin embargo, en un artículo publicado en Science Advances, los paleontólogos revelan lo que realmente estaba pasando: el "pico" es en realidad parte de un aparato mandibular en forma de cabeza de martillo, que utilizaba para alimentarse de las plantas en el suelo marino. Es el primer ejemplo conocido de un reptil marino herbívoro.
"Es un animal muy extraño", dice Olivier Rieppel, Rowe Family Curator of Evolutionary Biology en el Museo Field de Chicago. "Tiene una cabeza de martillo que es única. Es la primera vez que hemos visto un reptil como este", dice Rieppel, co-autor del estudio con sus colegas del Museo Nacional de Escocia, el Instituto de Paleontología de Vertebrados y Paleoantropología de China y el Centro de Wuhan del Servicio Geológico de China.
El nombre del reptil, Atopodentatus unicus, alude a su confuso pasado, que en latín significa "dentado extrañamente singular". Pero los fósiles recién descubiertos hace que sea más claro cómo se configuraron en realidad sus "extraños dientes". Su amplia mandíbula con forma de cabeza de martillo, y a lo largo del borde, tenía dientes como clavijas. Y, aún más dentro en su boca, tenía racimos dientes en forma de aguja.
"Para averiguar cómo la mandíbula encajaba entre sí y cómo se alimentaba el animal en realidad, compramos arcilla de niños, una especie de plastilina, y lo reconstruimos con palillos de dientes para representar los dientes", dice Rieppel. "Nos fijamos en cómo se ajustaban el maxilar superior e inferior, y así es como se procedió y lo describimos".
El veredicto: El Atopodentatus unicus utilizó su extraña mandíbula para ayudarse a comer plantas. "Con los dientes frontales raspaba las plantas encima de las rocas del fondo del mar, y luego abría su boca y tragaba los trozos de material vegetal. A continuación, utilizaba sus dientes aciculares como un tamiz, atrapando las plantas y dejando salir el agua, al igual que se alimentan las ballenas filtrando con sus barbas", explica Rieppel.
Este descubrimiento no solo resuelve el misterio del extraño animal con dientes, sino que también proporciona un ejemplo del primer reptil marino herbívoro. "La estructura de la mandíbula es claramente la de un herbívoro", dice Rieppel. "Tiene similitudes con otros animales marinos que comían plantas con un sistema de alimentación por filtración, pero el Atopodentatus era más antiguo que ellos por cerca de ocho millones de años".
El Atopodentatus también ayudará a contar una gran historia de la extinción en masa más grande del mundo hace 252 millones de años. "Los animales que vivieron en los años que rodean la extinción del Pérmico-Triásico nos ayudan a ver cómo reaccionó la vida en la tierra a ese evento", dice Rieppel. "La existencia de animales especializados como el Atopodentatus unicus nos muestra que la vida se recuperó y se diversificó más rápidamente de lo que se había pensado. Y es definitivamente un reptil que nadie habría pensado que existiese.
Artículo científico: The earliest herbivorous marine reptile and its remarkable jaw apparatus