El rey Carlos IV estaba preocupado por la amenaza de la colonia británica en Australia a los intereses del Pacífico de España y planeó un ataque en la década de 1790, de acuerdo con documentos de la Armada Española
España planeó atacar la nueva colonia británica en Australia con una armada de 100 buques como parte de una operación diseñada para "llevar la lucha con los británicos al Pacífico", de acuerdo con documentos de archivo recién descubiertos.