Fuerte disminución de las lluvias de verano hizo que vivir en Groenlandia fuera cada vez más inviable
Durante la mayor parte de cuatro siglos, la costa sur de Groenlandia definió el borde más occidental de la ocupación vikinga.
Seducidos por visiones de colinas verdes y tierra fértil, a fines del siglo X oleadas de inmigrantes nórdicos zarparon con la esperanza de una vida más fácil en el extranjero. En su apogeo, la población de la colonia se contaba por miles, repartidos en tres asentamientos principales.