Buques, plataformas petrolíferas y parques eólicos marinos se ven amenazados por los mares tempestuosos
La información proporcionada por los radar de satélites pueden ayudar a la detección y predicción de altura de las olas extremas
Los instrumentos de radar en algunos satélites pueden ser usados para obtener todo tipo de información interesante. La animación de arriba (y el vídeo más completo de abajo) ilustran la altura de las olas en el mar del Norte que fueron derivadas de las mediciones de radar por satélite.
La altura y la frecuencia de las olas en un gran masa de agua dependen en gran medida de la velocidad del viento en movimiento a través de la superficie. Los satélites con sensores de radar especializado son capaces de medir la velocidad del viento al ver la superficie del océano desde varios ángulos cuando pasan por encima.
El radar detecta la reflectividad del agua, que está determinada por la rugosidad de la superficie. Una reflectividad más alta significa agua más picada, que es causada por los vientos fuertes. La dirección del viento puede estimarse observando vetas de viento en las imágenes de radar de la superficie del agua.
En respuesta a las amenazas de las olas extremas a los buques, plataformas petrolíferas y parques eólicos en el Mar del Norte, la Agencia Espacial Europea está utilizando sus satélites para monitorear la rugosidad de la superficie del mar y ayudar a localizar grandes olas y alimentar los modelos informáticos que tratan de pronosticar las olas peligrosas.
Créditos multimedia: ESA/DLR