Este nuevo sistema es mucho menos agresivo para la flora y fauna marina
La turbina eólica flotante cuenta con aspas de 40 metros, y se eleva unos 30 sobre la superficie marina
La primera turbina eólica flotante ha sido inaugurada ayer martes día 8 de septiembre 2009, en aguas noruegas del mar del Norte, a unos 10 kilómetros de la costa. El aerogenerador, llamado Hywind y propiedad de la empresa petrolera Statoilhydro, desafía a la tecnología del siglo pasado y a las violentas tormentas de la zona gracias a una serie de boyas sujetas en el lecho marino. De hecho, la central podría compararse a un gran barco que ha lanzado sus anclas para mantener una posición estable: puede moverse, pero ni se cae ni se hunde.
Este nuevo concepto elimina las molestias tradicionalmente asociadas con esta forma de energía, según anunció la compañía petrolera noruega StatoilHydro, responsable del proyecto.
Las turbinas eólicas estáticas en alta mar - que descansan en un soporte fijado al fondo del mar unas pocas decenas de metros bajo la superficie- ya existían. Los grandes aerogeneradores offshore, como son conocidos, empiezan a ser habituales en aguas próximas, desde los Países Bajos hasta Dinamarca, pero todos están anclados con estructuras estáticas y en aguas someras. Normalmente, ni se superan los 10 metros de profundidad (el más profundo hasta la fecha, el parque escocés de Beatrice, está colocado a 45 metros).
Hywind es un proyecto desarrollado por StatoilHydro y consiste en el desarrollo de aerogeneradores marinos flotantes para aprovechar la energía eólica en mares profundos, permitiendo la instalación de parques offshore en profundidades de hasta 700 metros. Además este nuevo sistema es mucho menos agresivo para la flora y fauna marina. La electricidad será conducida mediante cables submarinos descartándose el empleo de generadores alimentados de gas, reduciéndose así las emisiones de CO2.
La inauguración de Hywind contó con la presencia del ministro noruego de Petróleo y Energía, Terje Riis-Johansen, y se realizó a 10 kilómetros de Karmoey, una isla en el suroeste del país escandinavo. "Tiene grandes ventajas: no necesita estar cerca de la costa, puede ser ubicado en lugares alejados de los pescadores o las aves, y es totalmente respetuosa del medio ambiente", afirmó Anne Stroemmen Lycke, responsable de energía eólica de la empresa noruega.
Otro de los atractivos radica en que no necesita inhibidores del ruido, como sucede con los molinos terrestres, porque lógicamente no hay nadie en el entorno que pueda ser molestado. Los principales inconvenientes, nada desdeñables, son el enorme coste de la obra, las dificultades técnicas para reparar posibles averías y el transporte de la energía hasta la costa mediante cables submarinos.
La nueva tecnología, en cambio, permite colocar un molino a una profundidad de hasta 700 metros. En el caso de Hywind, de 2,3 MW, se sujeta al fondo con tres cables y la zona tiene una profundidad de 220 metros. "Esta tecnología ofrece grandes oportunidades de negocio. Podemos contribuir al uso de turbinas en los países cuyas aguas costeras sean muy profundas o, cuya capacidad eólica en tierra está saturada", agregó Stroemmen Lycke.
La turbina eólica flotante cuenta con aspas de 40 metros, y se eleva unos 30 sobre la superficie marina. Su parte sumergida es un tubo de un centenar de metros de largo, al que se han añadido agua y rocas a modo de lastre para estabilizar la instalación. Se espera que la empresa comienza su producción en tan sólo unas semanas.
Durante los próximos dos años, la turbina eólica flotante se pondrá a prueba para proporcionar un análisis exhaustivo de este innovador concepto fruto de los últimos avances en ingeniería.
La turbina, fabricada por Siemens, está compuesta de acero revestido con un material para soportar las duras condiciones marinas, además, contiene tres cables que se anclan al fondo marino para lograr la estabilidad necesaria, los cuales tienen una longitud de unos 528 metros por debajo de la superficie, donde se adjunta a los cables de la red eléctrica submarina que se extiende por la costa.
Los ingenieros del proyecto han desarrollado conjuntamente un sistema de control de la turbina Hywind para atender a las especiales condiciones de funcionamiento de una estructura flotante. En particular, el sistema avanzado de control consigue que la turbina tenga la capacidad de amortiguar las olas que producen movimientos en la flotación del sistema, garantizando así una gran estabilidad y seguridad en la estructura.
Las turbinas flotantes tienen una serie de ventajas en comparación con la energía eólica marina tradicional, ya que no enturbian la vista de los residentes de la costa, careciendo de impacto sobre el hábitat, y aprovecha mejor las corrientes ya que en donde se localizan, los vientos son más fuertes y más constantes que en la costa. Sin embargo, las turbinas flotantes todavía le quedan mucho camino por recorrer antes de su puesta comercial. Inicialmente, estas turbinas serán mucho más caras que los modelos de turbinas basadas en tierra, aunque con el tiempo, sin embargo, se prevén que los costos irán disminuyendo.
Las turbinas flotantes podrían ampliar la capacidad de energía eólica en mar adentro para países con una limitada zona marina. Pronto conoceremos la evolución de la Hywind, así como las investigaciones derivadas en turbinas eólicas flotantes, una vez que el prototipo se conecte a la red y empiece a producir energía.
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