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A 3,2 millas (5,1 kilómetros) bajo el Océano Pacífico se eleva una enorme montaña desde el fondo del mar, dicen los científicos que descubrieron la montaña submarina utilizando tecnología de sonar.
El 16 de agosto enjambres de terremotos comenzaron cerca del volcán Bárðarbunga, y los temblores han persistido en las semanas posteriores (hasta 500 por día). Hasta la fecha, la erupción del Bárðarbunga ha producido flujos y fuentes de lava - algunas de hasta 200 metros o 650 pies de altura - pero no hay grandes nubes de ceniza. El 3 de septiembre la Oficina Meteorológica de Islandia informó que el nuevo campo de lava se extendía por un área de 7,2 kilómetros cuadrados (2,8 millas cuadradas), ligeramente más grande que Gibraltar.
Los vulcanólogos prevén que la lava que fluye desde la fisura Holuhraun entrará en una de las ramas del río glacial Jökulsá á Fjöllum si la tasa de avance sigue siendo la mismo, dice el vulcanólogo Thorvaldur Thordarson. La actividad volcánica en Holuhraun no ha disminuido desde ayer.
Una isla en el húmedo y atmosféricamente turbulento Atlántico Norte como es Islandia está a menudo envuelta en la capa de nubes y es difícil de observar desde el espacio. Y, últimamente, la isla está haciendo su propia cubierta de nubes, mientras la Tierra se ha dividido y abierto entre los volcanes Bardarbunga y Askja virtiendo lava y gas caliente. La vista del campo de lava Holuhraun ha sido espectacular desde el suelo y desde aviones en vuelo bajo. Imágenes infrarrojas hacen también espectacular vista desde el espacio.
La nueva fisura eruptiva en la erupción de Holuhraun en Islandia está mucho más cerca del glaciar Dyngjujokull que las anteriores, y arrastrándose hacia el glaciar, dice el vulcanólogo Armann Hoskuldsson, quien inspeccionó la nueva fisura esta mañana. El tremor volcánico indica que la fisura se abrió alrededor de las 4 PM.
Philip McNamara estaba en un barco frente a la costa de Papúa Nueva Guinea filmando el Monte Tavurvur cuando el volcán explotó, levantando una nube de ceniza y humo. La onda de choque posterior separó las nubes y empezó a mover el bote.
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