Nueva investigación proporciona información crucial para proteger esta especie globalmente vulnerable
La mantarraya de arrecife (Mobula alfredi) es una gran nadadora. Pueden viajar cientos de kilómetros para alimentarse. El movimiento más largo registrado para una mantarraya de arrecife individual fue de 1.150 km y se observó en el este de Australia.
Pero aunque son capaces de nadar largas distancias, un nuevo estudio del ecólogo marino Edy Setyawan, de la Universidad de Auckland, Waipapa Taumata Rau, sobre las mantarrayas de arrecife en Raja Ampat, en el suroeste de Papúa, descubrió que es más probable que naden cortas distancias. Parecen preferir permanecer cerca de sus hábitats locales, fortaleciendo sus vínculos sociales y formando distintas poblaciones.