Las emisiones de amoníaco del guano en las nubes reflejan la luz solar entrante
Cada año, las aves marinas migratorias pintan las rocas de las naciones del Ártico con su excremento o guano mientras anidan en el verano. Y el alto volumen de caca rica en amoniaco resulta que tiene un ligero efecto refrigerante en la atmósfera, informan los investigadores en Nature Communications.