También están más gordos, tienen más hijos y amplían sus territorios más hacia el sur
Sin embargo esto puede ser perjudicial para el año 2080 si continúa la tendencia
Fuertes vientos sobre el Océano Austral alrededor de la Antártida han ayudado a los albatros errantes a volar más rápido y a reproducirse con más éxito, dicen científicos europeos.Sin embargo el estudio, publicado revista Science, advirtió que los beneficios pueden ser de corta duración si el mundo continúa calentándose y las velocidades del viento cambian más en las próximas décadas.
El estudio se centró en cuatro décadas de datos desde 1966 sobre una población de albatros en las ventosas islas Crozet.
Los científicos comenzaron a montar cometas blancas con transmisores satelitales en 1989 - con mayor envergadura que la de los pájaros que tienen un promedio de unos tres metros - para seguir sus movimientos.
Con el tiempo, descubrieron que un aumento en la presión atmosférica, probablemente resultado de las temperaturas, ha incrementado la velocidad del viento en este sector del Océano Índico occidental donde vagan las aves.
Y el albatros ha respondido en consecuencia volando más rápido, estando cada vez más gordos en un promedio de un kilogramo al pasar menos tiempo buscando comida, tienen más hijos y amplían sus territorios más hacia el sur.
El albatros errante no empieza a reproducirse hasta los 8 o 9 años de edad y produce un solo huevo a la vez, más o menos cada tres años. Según algunas estimaciones, sólo hay alrededor de 25.000 parejas reproductoras.
"El albatros errante parece que hasta el momento se ha beneficiado de los cambios de viento que ocurren en el Océano Austral, con mayor velocidad que les permite viajar más rápido", dijo el estudio, que observa un cambio notable en la década de 2000 más que la década de 1990.
"En los albatros errantes se relaciona la probabilidad de encontrar y capturar presas con la distancia que los individuos son capaces de cubrir todos los días".
El más robusto tamaño de las aves fue "uno de los cambios más inesperados que se han observado en los últimos 20 años", dijo el estudio.
Un kilogramo adicional agrega del 10 al 12 por ciento del peso corporal de las aves, que normalmente es de unos ocho kilos para las hembras y 10 kilogramos para los machos, dijeron los autores.
El aumento de peso es más probable debido a la mejora del acceso a los alimentos, pero también podría ser una adaptación estructural de las aves, que puedan explotar su masa para potenciar al máximo su capacidad de vuelo en las zonas con más viento.
Pero si continúan las tendencias actuales, los vientos podrían llegar a ser demasiado rápidos para los albatros y en el año 2080 su hábito de alimentación en las Islas Crozet puede resultar poco práctico.
"Las velocidades de desplazamiento y fuga no responden linealmente con el aumento en la velocidad del viento, tormentas y vientos muy fuertes se vuelven desfavorables para la dinámica de vuelos en altura", dijo el estudio.
El estudio fue dirigido por Henri Weimerskirch y sus colegas del Centro de Estudios Biológicos de Chizé en Villiers en Bois, Francia, y Maite Louzao, del Centro Helmholtz de Investigación Medioambiental de Leipzig, Alemania.
Artículo científico: Changes in Wind Pattern Alter Albatross Distribution and Life-History Traits