Los científicos han registrado la inmersión de una ballena a 2.992 metros bajo la superficie
La ballena picuda de Cuvier (Ziphius cavirostris) ha hecho añicos su propio récord como buceo profundo así como el de los elefantes marinos, que eran los anteriores titulares.
La especie poco conocida de zifios, cetáceos con hocicos prominentes en forma de cigarro y que van desde los mares tropicales hasta los templados del norte, ha sido considerada como uno de los buceadores más extremos en el océano, capaces de alcanzar una profundidad de 1.888 metros y permanecer sumergidas durante 95 minutos.
Pero un nuevo estudio que a hecho un seguimiento a ocho individuos frente a la costa del sur de California a través de marcas satelitales, como muestra la foto de arriba, dice que pueden hacer mucho más. (Las ballenas picudas de Cuvier macho tienen colmillos, y las cicatrices en la parte posterior del macho de la foto son de pelear con otros machos).
Los científicos han registrado la inmersión de una ballena a 2.992 metros bajo la superficie, rompiendo el récord de profundidad de la inmersión de un elefante marino del sur que fue localizado a 2388 metros. Otra ballena picuda de Cuvier en el estudio se mantuvo por debajo de la superficie durante 2 horas y 17 minutos.
A diferencia de la inmersión profunda de los elefantes marinos y los cachalotes, que permanecen en la superficie durante un período prolongado después de sus inmersiones, los zifios se dirigen de nuevo a las profundidades menos de 2 minutos más tarde, informan los científicos en PLoS ONE.
Las ballenas picudas en el estudio hicieron sus inmersiones profundas cerca de siete veces al día, alimentándose de calamares y peces, pasando más tiempo en la superficie durante la noche.
Al comprender mejor los comportamientos de buceo de esta especie, los científicos esperan resolver un misterio permanente: ¿Por qué son las ballenas picudas de Cuvier particularmente sensibles a las operaciones militares de sonar? El Sesenta y nueve por ciento de todos los varamientos registrados de mamíferos marinos que se asociaron a este tipo de operaciones involucró a esta especie. Sin embargo, estas ocho ballenas fueron marcadas y seguidas en un campo de entrenamiento de sonar de la Marina de los EE.UU., lo que lleva a los científicos a sugerir que las ballenas picudas de Cuvier en esta área pueden haberse adaptado a los ruidos humanos tal vez, en parte, al convertirse en el más extremo de los buzos.
Artículo científico: First Long-Term Behavioral Records from Cuvier’s Beaked Whales (Ziphius cavirostris) Reveal Record-Breaking Dives
Para ver hasta que profundidad bucean otras criaturas, incluyendo los humanos, mira el siguiente gráfico (no te desanimes, se llega a la parte inferior):