Los icónicos mamíferos marinos de Hong Kong se enfrentan a graves amenazas
¿Delfines rosados en el puerto de Hong Kong? Sí. Delfines blancos chinos para ser exactos, aunque son conocidos por su color rosado, derivado de una red de vasos sanguíneos cerca de la superficie de su piel.
Los conservacionistas advierten que los delfines están en riesgo de desaparecer de aguas de Hong Kong, con la disminución de la población local por más de la mitad en la última década, hasta alrededor de 60 individuos hoy en día. La disminución de estos atractivos mamíferos marinos se atribuye en gran medida a la contaminación del agua y la pérdida de hábitat que ha llegado con el desarrollo y la ampliación de la extensión del puerto.
Los delfines rosados han vivido mucho tiempo en las aguas urbanas alrededor de las islas y en el puerto de Hong Kong, donde se han ganado un lugar simbólico en la historia y cultura de la ciudad. Sin embargo, existe una creciente preocupación entre los científicos de que estos raros animales desaparecerán de las bulliciosas aguas a menos que se haga más para conservarlos.
El aumento de la pérdida de hábitat, la contaminación acústica, y otras amenazas han tenido en la última década un impacto severo en el número de estos delfines rosados, también conocidos como delfines blancos chinos.
La actual construcción del puente Hong Kong-Zhuhai-Macao a través del territorio de los delfines puede ponerles tensión adicional, advierten los conservacionistas.
Los delfines blancos chinos nacen grises, pero se vuelven de color rosa a medida que envejecen.
Estas criaturas muy sociales son a menudo conocidos en los círculos científicos como delfines jorobados del Indo-Pacífico (Sousa chinensis). La especie se cree que existe desde la costa este de la India a través del archipiélago malayo y hacia Australia. Debido a su distribución fragmentada, es difícil determinar con precisión su población exacta, aunque los informes indican que el número está en declive.
Además, su tasa de reproducción es muy baja y los biólogos se encuentran con una alta mortalidad de juveniles, que significa que al menos la mitad de los jóvenes no sobreviven después del nacimiento. Además, el intervalo entre partos es más largo que en la mayoría de los delfines, alrededor de cuatro a seis años, por lo que sólo tienen un pequeño número de crías durante su vida.
Presumiblemente, los delfines han estado en Hong Kong y el estuario del Río de las Perlas durante mucho tiempo, probablemente antes de que nuestros antepasados comenzaran a poblar esta región. La conciencia de ellos creció en la década de 1990, cuando el gobierno comenzó a planear el nuevo aeropuerto internacional al norte de Lantau, que afectó a su hábitat. Los delfines se hicieron muy famosos cuando fueron elegidos como la mascota oficial para la ceremonia de entrega de la ciudad [del Reino Unido a China] en 1997.