En su fisiología normal, el aire fluye entre los pulmones y el espiráculo de un delfín
Si has estado viendo Stranger Things (cosas extrañas) de Netflix, ya sabes que a lo que llaman una "boca de ventilación" (mouth-breather) es un insulto de primer orden (equivalente a estúpido). Pero para unos delfines, poseer una boca de ventilación ha significado probablemente la diferencia entre la vida y la muerte.
Los delfines no respiran normalmente por la boca. En su lugar, inhalan y exhalan a través del orificio de respiración en la parte superior de sus cabezas. Pero hace tres años unos investigadores de Nueva Zelanda notaron la cosa más extraña en un delfín de Héctor o de cabeza blanca (Cephalorhynchus hectori) que, ignorando deliberadamente millones de años de evolución, respiraba por su gran boca dentada. Y esta historia se hace aún más extraña si se sabe algo acerca de los delfines.
A diferencia de los seres humanos, la laringe de un delfín (que lleva el aire a los pulmones y al esófago, y en los humanos lleva el alimento al estómago), no comparte generalmente una abertura. En otras palabras, los delfines no tienen que preocuparse por algo que "va por el conducto equivocado". Pero los dos sistemas no están totalmente separados. La laringe del delfín en realidad baja recta a través de su esófago.
Esta disposición podría ser ciertamente un problema para los delfines cuando están tratando de comer un pez particularmente grande, dice Stephen Dawson, un biólogo marino de la Universidad de Otago en Nueva Zelanda, y autor principal de un documento publicado la semana pasada que describe la respiración por la boca del delfín. Pero esta peculiar solución de la fisiología también permite al delfín algo particular.
En los delfines, la laringe no es un tubo sólido que conecta el orificio de respiración a los pulmones. En cambio, las vías respiratorias de un delfín están hechas de múltiples secciones de cartílago entrelazadas. Al final de una de estas secciones está la salida de la epiglotis, que se encuentra donde la laringe pasa a través del esófago. Normalmente, el pico de la epiglotis se mantiene en su lugar por un fuerte músculo. Pero en este delfín de Héctor de respiración bucal, los científicos sospechan que, cada vez que respira, se retira este surtidor de manera que los pulmones se conectan a la boca, en lugar de al espiráculo.
Derecha: En su fisiología normal, el aire fluye entre los pulmones y el espiráculo de un delfín. En el delfín de respiración bucal, los científicos sospechan que la laringe se desconecta de su vía normal en el pico de la epiglotis, y en su lugar crea una abertura a la boca.
Dawson y sus colaboradores no pueden decir con certeza por qué el delfín hace esto, pero tienen algunas ideas. El escenario más probable parece ser una especie de capricho de los músculos que controlan el espiráculo, ya que permanecen bien cerrados, incluso cuando el delfín está en la superficie. Esto podría ser una lesión, absceso, tumor, u otra obstrucción que impide que el orificio de respiración se abra correctamente. También es posible que los músculos alrededor de donde se cierra el esófago de la laringe se infecten o lesionen, o que un objeto extraño ha encontrado su camino en otro lugar del sistema respiratorio.
Cualquiera que sea la causa, los investigadires han sido visto a delfines realizar este comportamiento durante tres años, aparentemente sin efectos nocivos.
Dawson dice que hay antiguas sospechas de que los delfines tienen alguna manera de mover su laringe para crear más espacio. "Pero lo publicado en la literatura, y la opinión predominante entre los especialistas en mamíferos marinos, es que esto era imposible", dice.
Es decir, hasta que apareció la respiración bucal de este delfín.
"El comportamiento es un poco sorprendente, ya que no se ha observado ni se informó anteriormente", dice Ted Cranford, un biólogo marino de la Universidad Estatal de San Diego, que no participó en la nueva investigación.
Cranford estudia la evolución de los delfines, particularmente en lo que se refiere al biosonar, y dijo que, hablando anatómicamente, puede ser posible.
"Está claro que no hay nada que impida a estos animales el uso de esta nueva vía", dijo Cranford. "Todos debemos tener en cuenta que la plasticidad de comportamiento probablemente tiene más posibilidades de variación de lo que podríamos esperar".
En otras palabras, no se sabe lo que un animal podría ser capaz de hacer cuando está en juego la supervivencia. Respiración bucal en un delfín, ¿por qué no?
Artículo científico: Observations of a New Zealand dolphin (Cephalorhynchus hectori) breathing via its mouth