
Con sus afiladas garras y espinas dorsales en la cresta, el reptil se parece a una criatura prehistórica
Inusualmente cálidas para esta época del año, las aguas del Pacífico señalan tiempos difíciles para los habitantes reptilianos de las icónicas Islas Galápagos de Ecuador.
La templada temperatura es el primer síntoma de un nuevo ciclo del fenómeno meteorológico El Niño que periódicamente predica una sentencia de hambre sobre las iguanas marinas del archipiélago.