Es posible que los delfines vean a los manatíes como competencia por alimentos u otros recursos
Un equipo internacional de científicos marinos ha observado múltiples casos de delfines mulares atacando a crías de manatí durante muchos años. En su artículo el grupo describe el comportamiento que observaron y sugiere posibles explicaciones para lo que describen como interacciones antagónicas entre delfines y manatíes juveniles.
Investigaciones anteriores han demostrado que los delfines mulares (Tursiops truncatus) pueden ser agresivos tanto con otros delfines como con miembros de otras especies, particularmente otros tipos de mamíferos marinos. En este nuevo trabajo, el equipo de investigación observó delfines mulares que intentaban separar a las crías de manatí de sus madres y las mordían en múltiples ocasiones.
Los manatíes antillanos (Trichechus manatus manatus) son mamíferos acuáticos que se parecen un poco a focas de gran tamaño. Por lo general, viven en aguas poco profundas y, debido a su dócil comportamiento, a veces se les conoce como vacas marinas. También son vegetarianos y sobreviven comiendo algas.
No tienen garras ni afilados dientes, lo que los hace vulnerables al ataque de otros depredadores marinos como orcas, tiburones, caimanes y cocodrilos, su único medio real de defensa es vivir en aguas poco profundas donde las ballenas y los tiburones no pueden alcanzarlos y alejarse nadando si ven que se acerca un cocodrilo o un caimán.
El delfín mular no se alimenta de manatíes, por lo que los investigadores se sorprendieron al verlos atacando a sus crías.
Vídeo: Observaciones aéreas con drones de dos interacciones diferentes entre delfines mulares y crías de manatí antillano. Crédito: MÁS UNO (2024). DOI: 10.1371/journal.pone.0295739
El equipo de investigación ha estado estudiando los delfines mulares frente a la costa de Belice durante aproximadamente 21 años y, durante ese período, observaron 10 ataques a crías de manatí. La forma de ataque varió desde el simple acoso hasta embestidas y mordiscos. En todos los casos, los delfines iniciaron el ataque. El equipo también encontró casos de marcas de mordeduras de delfines en crías huérfanas.
El equipo de investigación no pudo encontrar ningún motivo para los ataques; los delfines no intentaban comerse a los manatíes; su comportamiento sugería que estaban más interesados en simplemente acosar a las jóvenes criaturas. Sugieren que es posible que los delfines vean a los manatíes como competencia por alimentos u otros recursos. Concluyen que el comportamiento es común y, por tanto, pone en riesgo al manatí al ser una especie amenazada.
"Los delfines no comen manatíes y no está claro por qué actúan de esta manera con otras especies", dijo el autor principal del estudio, Eric Angel Ramos, científico de la Fundación Internacional para la Naturaleza y la Sostenibilidad (FINS), un equipo de científicos conservacionistas internacionales. "Es probable que sientan mucha curiosidad cuando se encuentran con manatíes, y debido a que los delfines suelen ser agresivos entre sí, muestran este comportamiento con otras especies como los manatíes".
La investigación se ha publicado en la revista de acceso abierto PLOS ONE: Agonistic interactions initiated by adult bottlenose dolphins on Antillean manatee calves in the Caribbean Sea