Sorprendentes fotografías de la marina de Estados Unidos en el Polo Norte
Desde la perspectiva de un oso polar, esto le debía parecer como la ballena más grande que jamás habían visto traspasando el hielo. Ni que decir tiene, los curiosos osos se dirigieron a investigar este submarino que había roto el hielo desde debajo. No le sólo echaron un vistazo, sino que pasaron dos horas asegurándose de que no había nada comestible o de interés.
Este oso se ve como si estuviera a punto de comenzar una pelea con el enorme intruso en su territorio. Los osos polares son, de hecho, no territoriales, a diferencia del oso pardo, pero nada por supuesto tan extraño como un periscopio sobresaliendo del hielo llamaría su atención. Pasó unos 40 minutos en la investigación y luego deambuló lejos. Un agujero de este tipo en el hielo es normalmente un orificio de respiración para las focas, donde cogería su comida, pero esta vez no.
Este oso polar de la derecha se puso de pie para inspeccionar un periscopio. Como es un oso joven tiene un buen tiempo antes de que esté viejo y chirriante; los osos polares viven en la naturaleza generalmente unos 25 años de edad, por lo que tiene un montón de tiempo para acostumbrarse a estas "bestias" metálicas que vienen de las profundidades del mar.
Tal vez preguntándose si debía ir a ver lo que realmente es, un joven oso examina el agua alrededor de la zona del timón. El submarino en cuestión es el USS Honolulu, a tan sólo 280 kilómetros del Polo Norte, que estaba recogiendo muestras de agua y realizando otros estudios científicos.
¡Este macho parece que quiere unirse a la Marina y subir al submarino! Los osos polares cazan en el hielo del mar en lugar de en la tierra congelada, en busca de focas que vienen de los agujeros para respirar y las emboscan sigilosamente. Él pudo haberse preguntado si esto era un súper monstruo que le comería, o si se trataba de algo de comida para sí mismo. Sería bueno saber lo que pasaba por su mente.
Como puedes ver, los encuentros de osos polares con submarinos no son tan raros y es divertido para todos los interesados.
Imágenes: Chief Yeoman Alphonso Braggs, Mark Barnoff, US-Navy | Texto: Michele Collet, Environmental grafitti