Pueden alcanzar 4 kilos de peso y medir más de 90 cm
Las almejas geoduck del Pacífico son grandes almejas de agua salada que pueden vivir más de 165 años. Estas criaturas marinas de aspecto fálico tienen cuellos muy largos llamados sifones y se consideran un manjar culinario.
Se cree que el nombre geoduck proviene de la palabra de la tribu nativa americana Nisqually, "gwídeq", que significa "cava hondo". Son las almejas excavadoras más grandes del mundo y viven en el fondo del océano hasta una profundidad de 3 pies (1 metro).
Las almejas geoduck (Panopea generosa) son bivalvas, lo que significa que su cuerpo está comprimido entre una concha que consta de dos partes articuladas. Tienen un pie que les ayuda a excavar en el sedimento y anclarse al suelo. Para comer, el molusco succiona agua de mar, la filtra en busca de plancton y nutrientes y expulsa el exceso a través de su sifón. Este apéndice tiene dos aberturas en el extremo: una para tomar oxígeno y fitoplancton, y otra para liberar el exceso de agua.
Aunque el caparazón de una geoduck suele medir entre 15 y 20 centímetros (6 a 8 pulgadas) de largo, el sifón puede crecer más de 3 pies (91 cm) de largo. En sus primeros tres a cinco años, las almejas geoducks crecen hasta 1,5 libras (0,7 kilogramos). En promedio, las almejas geoducks pesan alrededor de 2,5 libras (1,1 kilogramos), pero pueden alcanzar 4 kilogramos.
Las almejas geoduck adultas tienen sexos separados y alcanzan la madurez sexual alrededor de los 3 años. Las almejas geoduck macho son capaces de reproducirse durante más de 100 años. Las hembras tienen ovarios muy grandes que contienen muchos millones de huevos y liberan entre 1 y 2 millones de huevos por desove.
Mientras que otras almejas se mueven para evitar a los depredadores, las geoducks reaccionan retrayendo sus sifones. Son presa de cangrejos, cazones, nutrias marinas y estrellas de mar. Las almejas geoduck se consumen en todo el mundo y se sirven cocidas o crudas en sushi o sashimi.
Se recolectan tanto en estado silvestre como en cultivo, especialmente en el estado de Washington. A veces se dice que estas almejas tienen propiedades afrodisíacas, probablemente debido a su forma, pero no hay evidencia científica que respalde esta afirmación.
