El pez guitarra puede hundir su ojo cerca de 40 mm
Al igual que los tiburones el pez guitarra gigante no tiene párpados que se cierren del todo, por lo que no puede parpadear. Eso puede garantizar una victoria en un concurso de miradas, pero también plantea problemas para la protección ocular de la arena en las aguas tropicales donde vive la criatura.
Así que cuando golpea a una presa se levantan trozos de arena o de coral. Pero el pez guitarra se protege con un llamativo método: retrae sus ojos casi por completo en la cabeza, dejando una depresión parecida a un cráter.
Ahora, una nueva investigación muestra que el pez guitarra pueden agradecer esa habilidad a un músculo especializado del ojo.
Utilizando vídeo de alta velocidad, los investigadores encontraron que un pez guitarra (Rhynchobatus djiddensis) podría hundir su ojo cerca de 40 mm. Eso es casi tanto como el diámetro del globo ocular y probablemente más que cualquier otro vertebrado, informaron los investigadores en línea en Zoology.
Un músculo conocido como el oblicuo inferior parece ser la clave. Cuando los investigadores estimularon eléctricamente el músculo en un pez guitarra diseccionado, el globo ocular se hundió.
Otros animales, incluyendo ranas, delfines mulares y saltarines del fango, también retraen sus ojos, pero emplean un mecanismo diferente. Algunas rayas y los patines, sin embargo, tienen la misma disposición muscular que el pez guitarra, por lo que los investigadores los están mirando para futuros estudios.
Diario de referencia: Zoology - "Eye retraction in the giant guitarfish, Rhynchobatus djiddensis (Elasmobranchii: Batoidea): a novel mechanism for eye protection in batoid fishes"