El Anelasma squalicola parasita de por vida a su tiburón anfitrión
En la insondable oscuridad de la alta mar, la mayoría de las criaturas no se verían fuera de lugar en nuestras pesadillas. Enormes y puntiagudos dientes, grandes ojos amenazantes y algunos animales con la capacidad de brillar en la oscuridad, aquí es Halloween durante todo el año. Sin embargo, no son peces o incluso tiburones las criatura más aterradoras. Es un percebe.
Pero no es cualquier viejo percebe. Este percebe hace madrigueras en la carne de los tiburones de aguas profundas, descargando todo lo que necesita de la sangre de sus víctimas. El percebe es el Anelasma squalicola y fue, de hecho, descrito primeramente por Charles Darwin en su opus magnum de 1851.
La mayoría de los percebes se adhieren a las superficies duras de las rocas y extienden largos apéndices en la columna de agua para alimentarse de los nutrientes que flotan. Algunos percebes incluso se adhieren a los cuerpos de las ballenas y tortugas, pero aún adoptan este método convencional de alimentación por filtrado.
Este percebe ha evolucionado de una manera bastante horripilante para alimentarse. En lugar de extender un aparato en la columna de agua, este percebe incrusta un órgano de ramificación, llamado pedúnculo ("pd" en la imagen), en lo profundo de la carne del tiburón. Una vez sujeto, el percebe se mantendrá y crecerá durante la duración de la vida del tiburón, alimentándose de su sangre y nutrientes. Este es en realidad el único percebe que sabemos que hace esto a los vertebrados. Una reciente revisión de este percebe que se alimenta de tiburones se puede encontrar aquí.
El parásito también parece ser capaz de eludir el sistema inmunitario de su huésped. Sin inflamación o infección alrededor del apego, parece que los tiburones son casi ajenos a sus repugnante pasajeross... a menos que excaven su madrigera en la pelota del ojo por supuesto.
En un reciente crucero de investigación se encontró que alrededor de 20-30% del total de cazón negro (Centroscyllium fabricii) y el 10% de los mayores tiburones linterna (Etmopterus princeps) se infestaron con este percebe parasitario. Pegados a la piel y los ojos, estos parásitos han desarrollado claramente un gusto por los tiburones de aguas profundas.
Se puede notar en las fotos del cazón "negro", que en realidad se ve muy blanco (arriba). Esto es debido a que tiene dentículos dérmicos muy delicados. Cuando estos tiburones son atrapados en redes de pesca, a menudo pierden sus dentículos dérmicos, exponiendo su piel blanca de debajo. La mayoría de los tiburones de aguas profundas tienen dentículos dérmicos muy gruesos, pero su fragilidad en estas dos especies pueden ser la forma en que estos percebes son capaces de infestar sus colas, aletas, branquias, piel e incluso los ojos.
Así que durante este Halloween, mientras nos acercamos a invierno, no estés demasiado preocupado por controlar el resfriado común o gripe. Queda agradecido de que no eres un tiburón de la alta mar y tengas que preocuparte por una infección de por vida de un hambriento percebe que chupa de tu carne.
