Al parecer, no hay efectos adversos en su sistema inmunológico
Investigadores encontraron altas concentraciones de mercurio, arsénico y plomo en muestras de sangre obtenidas de tiburones blancos en Sudáfrica. Las muestras tenían niveles que serían considerados tóxicos para muchos animales.
Sin embargo, el estudio no encontró aparentes consecuencias negativas de estos metales pesados en varios parámetros de salud medidos en los tiburones, incluida la condición corporal, leucocitos totales y relaciones de granulocitos a linfocitos, lo que sugiere que no hay efectos adversos en su sistema inmunológico.
"Los resultados sugieren que los tiburones pueden tener un mecanismo de protección fisiológico inherente que mitiga los efectos dañinos de la exposición a metales pesados", dice Liza Merly, autora principal del estudio y profesora principal de la Escuela Rosenstiel de Ciencias Marinas y Atmosféricas de la Universidad de Miami (UM).
"Como depredadores ápice, los tiburones bio-acumulan toxinas en sus tejidos a través de la red alimenticia de la presa que comen", dice Neil Hammerschlag, coautor del estudio y profesor asociado de investigación en la Escuela Rosenstiel de la UM y en el Centro Abess para la Ciencia y Política del Ecosistema.
"Entonces, medir las concentraciones de toxinas, como el mercurio y el arsénico, en la sangre de los tiburones blancos, pueden actuar como 'indicadores del ecosistema' para la salud del ecosistema, con implicaciones para los seres humanos. Básicamente, si los tiburones tienen altos niveles de toxinas en sus tejidos, es probable que las especies que comen debajo de ellos también tengan toxinas, incluidos los peces que comen los humanos", añadió.
Para el estudio, fueron capturados y muestreados en Sudáfrica 43 grandes tiburones blancos, como parte de la expedición al área Ocearch 2012. "Para recolectar las muestras, los tiburones blancos fueron subidos cuidadosamente en una plataforma especializada, mientras que los biólogos tomaron muestras de sangre y el cuerpo antes de que los tiburones fueran marcados y liberados", dijo Chris Fischer, líder de la expedición y presidente fundador de Ocearch.
Se analizó la sangre de tiburón en busca de concentraciones de 12 oligoelementos y 14 metales pesados. Este estudio proporciona el primer relato publicado de las concentraciones en sangre de metales pesados en tiburones salvajes. Los datos son fundamentales para crear una línea de base y una referencia para los niveles de metales pesados presentes en la sangre de los tiburones blancos en Sudáfrica.
Teniendo en cuenta que muchas poblaciones de grandes tiburones blancos están experimentando disminuciones en todo el mundo, es importante comprender el impacto de los metales tóxicos, si es que los hay, en esta población.
La posibilidad de que los tiburones blancos puedan tener un mecanismo fisiológico que los proteja de los efectos dañinos de la exposición a metales ofrece nuevas oportunidades para futuras investigaciones con tiburones.
El estudio se titula "Blood plasma levels of heavy metals and trace elements in white sharks (Carcharodon carcharias) and potential health consequences", se publicó en el Marine Pollution Bulletin el 19 de marzo de 2019.