Era un tiburón tigre capturado el jueves en Saint-Leu, en la isla Reunión
Se han encontrado restos humanos en el estómago de un tiburón capturado en una pequeña isla en el Océano Índico después de que un kayakista desapareció a principios de este mes.
Un tiburón tigre capturado el jueves en Saint-Leu, en la isla Reunión, tenía los restos de un cuerpo humano dentro de su estómago, según informes locales. Una disección de rutina como parte de un programa de pesca preventiva encontró en el estómago extremidades humanas y una cadena.
El descubrimiento se produce luego que un kayakista de unos 70 años fuera reportado como desaparecido el 12 de diciembre después de hacer un viaje en las aguas frente a la costa de Saline-les-Bains.
Según la publicación local Clicanoo, los familiares reconocieron que las joyas que se encontraron dentro del cuerpo del tiburón pertenecen a su familiar desaparecido. Aún no se han realizado pruebas forenses para confirmar la identidad de lo que queda de la persona.
Puede que nunca se sepa si la persona fue mordida por el tiburón antes o después de su muerte.
Un evento similar se desarrolló cuando los científicos diseccionaron un tiburón tigre frente a la costa de Nueva Providencia en las Bahamas.
El tiburón estaba a punto de ser lanzado nuevamente al agua cuando escupió un brazo humano.
Según un informe de Royal Bahamas Police Force y Fairfax Identity Laboratories, una disección encontró los restos de dos cuerpos, que incluían una pierna derecha, dos brazos y un torso.
Y, a principios de este mes, un enorme tiburón le mordió el brazo a una madre que estaba haciendo snorkel en las Bahamas.
Tiffany Johnson, de 34 años, nadaba con su esposo frente a Paradise Island en las Bahamas mientras estaba de vacaciones en un crucero cuando ocurrió el ataque. Su esposo, James Johnson, había regresado al barco después de enfermarse, dejando sola a la Sra. Johnson. Ella le aseguró que volvería al barco después de pasar más tiempo en el océano. Al intentar regresar al barco, la señora, de Carolina del Norte, fue atacada por un tiburón.
El agresivo depredador apretó las mandíbulas sobre el brazo derecho de la mujer mientras nadaba bajo el agua. Luego le arrancó el brazo desde el codo mientras intentaba luchar contra el tiburón y nadar de regreso a la superficie.
A pesar de estos casos, los ataques fatales de tiburones contra humanos son extremadamente raros.
Según el International Shark Attack File, en 2018 se reportaron 132 mordeduras de tiburón en todo el mundo. En al menos 34 de estos casos, el tiburón había sido provocado. La mayoría de los incidentes, 32, tuvieron lugar en los Estados Unidos. Solo Florida informó de unos 16 ataques. Surfistas, nadadores y buceadores se encontraban entre los grupos con mayor probabilidad de ser atacados.
Si bien puede ser difícil identificar las especies de tiburones implicadas en un ataque, las especies más comúnmente implicadas son, en orden descendente, el gran blanco (Carcharodon carcharias), el tigre (Galeocerdo cuvier) y el toro (Carcharhinus leucas).
