
Modera el cambio climático global mediante la absorción de calor y carbono
El Océano Austral o Antártico es “la sala de máquinas” del clima y el sistema meteorológico del mundo. A lo largo de sus grandes extensiones de agua ininterrumpida, los vientos cobran velocidad y las olas acumulan energía.
Los fuertes vientos y las grandes olas alimentan el intercambio de calor y gas (incluido el dióxido de carbono) entre el aire y el mar. Como resultado, el Océano Austral tiene la capacidad de almacenar y liberar más calor que cualquier otro lugar de la Tierra.