La Chelonoidis elephantopus fue vista por última vez en la isla Floreana hace 150 años
Encuentran descendientes híbridos de cruces entre la Chelonoidis elephantopus y otra especie de tortuga
Un análisis genético de una tortuga de Galápagos revela el ADN de una especie relacionada que se cree se extinguió hace 150 años, lo que sugiere que las dos especies se aparean y producen descendencia híbrida.
Los investigadores de la Universidad de Yale "encontraron" la especie perdida, llamada Chelonoidis elephantopus, mediante el análisis del genoma de una especie estrechamente relacionada, la Chelonoidis becki, que vive en la Isla Isabela, la mayor de las Islas Galápagos en el Océano Pacífico. La isla se encuentra a unas 200 (322 kilómetros) de la Isla Floreana, donde fue vista por última vez la C. elephantopus antes de desaparecer, probablemente debido a la caza de los balleneros, hace unos 150 años.
Las dos especies de tortuga gigante solo viven en las islas Galápagos (famosas por haber sido estudiadas por Charles Darwin), y tienen formas distintas. Las conchas de la C. elephantopus en la isla Floreana tenían forma de silla, mientras que las tortugas en las islas, incluyendo a la C. becki, tienen la concha en forma de cúpula. Estas tortugas gigantes pueden llegar a pesar casi 900 libras (408 kilogramos) y llegar a casi 6 pies (1.8 metros) de longitud.
Se encuentran híbridos
Los investigadores se dieron cuenta en 2008 que algunas de las conchas de las C. becki eran más en forma de silla de montar que de forma abovedada, y encontraron que éstos eran descendientes híbridos de cruces entre las dos especies. Se tomaron muestras en la isla para análisis genéticos de 1.669 de las grandes tortugas, el 20 por ciento de su población.
En la población encontraron algunos fragmentos de genoma de la C. elephantopus, y usaron un modelo especial de computadora que analiza qué tan recientemente estos genes han entrado en la población. Esto habría ocurrido cuando la C. elephantopus se apareó en vida con una C. becki - y es una prueba indirecta de que en ese momento la tortuga C. elephantopus vivía.
Los científicos encontraron que en 84 tortugas había indicadores genéticos de que uno de los padres era una C. elephantopus, 30 de las cuales eran menores de 15 años de edad. Dada la vida útil de 100 años de las tortugas, los investigadores dicen que hay una buena probabilidad de que su padre C. elephantopus aún estaría vivo.
Artículo científico: Genetic rediscovery of an extinct Galápagos giant tortoise species
Más información: Subspecies of Galápagos tortoise