Investigación sobre pasados huracanes busca reducir el riesgo futuro
Las tormentas tropicales, como los huracanes, no solo son aterradoras, sino también increíblemente costosas para las regiones costeras de Estados Unidos, México, América Central y el Caribe. Más allá de la devastación inmediata, estas tormentas contribuyen a importantes pérdidas económicas y desplazamientos humanos. Solo en 2023, la migración climática vinculada a tales eventos hizo que 2,5 millones de personas intentaran cruzar la frontera terrestre del sur de Estados Unidos.
Una investigación dirigida por la Universidad de Texas en Arlington (UTA) destaca que estudiar los impactos de las pasadas tormentas tropicales puede ayudar a las comunidades a prepararse mejor para las futuras tormentas.
Una parte clave del estudio es analizar los tipos y cantidades de precipitaciones relacionadas con las tormentas en las regiones afectadas para comprender su papel en los recursos hídricos locales. Al mitigar los daños excesivos, esa preparación podría permitir que más personas permanezcan en sus países de origen, algo que es cada vez más urgente, ya que se espera que el cambio climático haga que las tormentas tropicales sean entre un 10 y un 15% más frecuentes e intensas.
"Ya sabemos que las tormentas tropicales tienen un gran impacto en los recursos hídricos de las comunidades, pero pocos estudios han examinado la escorrentía de agua de estos eventos y cómo afectan a las poblaciones locales; ahí es donde entra nuestra investigación", dijo Ricardo Sánchez-Murillo, autor principal del estudio y profesor asociado de ciencias de la tierra y ambientales en la UTA.
Imagen derecha: Contribuciones de los ciclones tropicales a la precipitación en la región de estudio.
El Dr. Sánchez-Murillo y su equipo, en colaboración con socios internacionales de regiones propensas a huracanes en Bahamas, Costa Rica, República Dominicana, El Salvador, Honduras, Jamaica, México, Nicaragua y Trinidad y Tobago, analizaron "huellas dactilares" del agua, conocidas como composiciones isotópicas. Al estudiar datos isotópicos de pasadas tormentas, proporcionaron nuevos conocimientos sobre cómo las precipitaciones relacionadas con las tormentas influyen en los ciclos hídricos regionales, lo que profundiza nuestra comprensión de estos eventos climáticos.
"Nuestro análisis exhaustivo de las composiciones isotópicas en las precipitaciones derivadas de tormentas tropicales ofrece una comprensión más profunda del papel que estos sistemas meteorológicos desempeñan en los ciclos hídricos regionales y las predicciones climáticas", afirmó Sánchez-Murillo.
"Estos resultados subrayan la importancia de tener en cuenta las precipitaciones asociadas a las tormentas. Creemos que comprender los impactos de las precipitaciones ayudará a las comunidades a prepararse mejor para las tormentas extremas y a gestionar los recursos hídricos locales tanto antes como después de las tormentas".
Los futuros estudios investigarán los patrones de evaporación y recarga de aguas subterráneas resultantes de las tormentas tropicales, así como también cómo las trayectorias de las tormentas podrían cambiar debido al cambio climático.
"Esta investigación tiene amplias implicaciones para mejorar nuestra comprensión de cómo las tormentas tropicales impactan los recursos hídricos y el clima, lo que conduce a mejores predicciones y estrategias de gestión", dijo Sánchez-Murillo.
La investigación se ha publicado en Annals of the New York Academy of Sciences: Stable isotope tempestology of tropical cyclones across the North Atlantic and Eastern Pacific Ocean basins