Las implicaciones de estos rápidos cambios invernales para el ecosistema ártico son de gran alcance
Un nuevo comentario publicado en Nature Communications por el Dr. James Bradley, profesor de Ciencias Ambientales en la Universidad Queen Mary de Londres, y su equipo revela un dramático y preocupante cambio en el invierno ártico.
Durante una campaña de trabajo de campo en Svalbard en febrero de 2025, los investigadores encontraron temperaturas excepcionalmente altas, deshielo generalizado y vegetación floreciente.
Svalbard, con un calentamiento de seis a siete veces superior al promedio global, se encuentra en la vanguardia de la crisis climática, con temperaturas invernales que aumentan casi el doble del promedio anual. El comentario destaca que el calentamiento invernal en el Ártico ya no es una excepción, sino una característica recurrente de un sistema climático profundamente alterado, lo que desafía la suposición sostenida durante mucho tiempo de que el invierno ártico se mantiene siempre congelado.
"Estar en los charcos de agua en la entrada del glaciar, o en la tundra verde y desnuda, fue impactante y surrealista", describe el Dr. Bradley su experiencia. "La espesa capa de nieve que cubría el paisaje desapareció en cuestión de días. El equipo que empaqué parecía una reliquia de otro clima".
El equipo, acostumbrado a prepararse para el frío extremo con capas térmicas, guantes gruesos y plumón aislante, se encontró trabajando en el glaciar con las manos desnudas bajo la lluvia.
Imagen derecha: Los investigadores informan: "La vegetación emergió a través del derretimiento de la nieve y el hielo, mostrando tonos verdes típicamente asociados con la primavera y el verano".
Laura Molares Moncayo, estudiante de doctorado en Queen Mary y el Museo de Historia Natural, y coautora del estudio, añadió: "El objetivo de nuestra campaña de trabajo de campo era estudiar la nieve recién caída. Sin embargo, durante dos semanas, solo pudimos recolectar nieve fresca una vez, ya que la mayor parte de la precipitación cayó en forma de lluvia. Esta falta de nevadas en pleno invierno dificulta nuestra capacidad de establecer una línea de base representativa de los procesos de la temporada de heladas".
"El inesperado deshielo no solo alteró nuestro plan de muestreo, sino que también nos hizo cuestionar cuán seguro o factible es realmente el trabajo de campo invernal en condiciones tan cambiantes".
Esta experiencia directa corrobora las proyecciones de larga data sobre la amplificación del Ártico, pero también subraya la alarmante velocidad a la que se están consolidando estos cambios. Superar el umbral de fusión de 0 °C tiene un impacto transformador en el entorno físico, la dinámica de los ecosistemas locales y la propia metodología de la investigación científica en el Ártico durante el invierno.
Imagen: Las lluvias sobre Svalbard provocaron un deshielo generalizado y la acumulación de agua de deshielo, que los investigadores pudieron atravesar como si fueran charcos gigantes. En la imagen, un charco de agua de deshielo sobre el suelo congelado en la entrada del glaciar Midtre Lovénbreen, 26 de febrero de 2025.
Las implicaciones de estos rápidos cambios invernales para el ecosistema ártico son de gran alcance. Los eventos de calentamiento invernal pueden afectarlo todo, desde el ciclo microbiano del carbono hasta la supervivencia de la fauna ártica.
Estos eventos también pueden crear un ciclo de retroalimentación, acelerando el deshielo del permafrost, la degradación microbiana del carbono y la liberación de gases de efecto invernadero en todo el Ártico. La acumulación de agua de deshielo observada sobre el suelo congelado, que forma vastos lagos temporales y reduce la capa de nieve a cero en amplias zonas, expone aún más la superficie del suelo desnudo y provoca proliferaciones generalizadas de actividad biológica.
El comentario exige medidas urgentes y destaca importantes implicaciones políticas.
"La política climática debe adaptarse a la realidad de que el Ártico está cambiando mucho más rápido de lo previsto, y el invierno es el núcleo de ese cambio", afirma el Dr. Bradley.
Imagen: Un pozo de nieve en Autre Brøggerbreen, 1 de marzo de 2025. La profundidad de la nieve (desde la superficie de la nieve hasta la superficie del hielo del glaciar) fue de 60 cm, con múltiples capas de hielo en todo el manto de nieve, lo que indica que el evento de derretimiento de febrero no fue un suceso único este invierno.
Bradley insta urgentemente a una mayor inversión en la vigilancia invernal del Ártico, destacando la importante falta de datos y comprensión de los sistemas árticos durante esta estación de rápida evolución. Es crucial realizar más observaciones y experimentos, no solo para establecer puntos de referencia, sino también para proyectar los futuros impactos.
Además, los autores enfatizan que la formulación de políticas debe cambiar de estrategias reactivas a anticipatorias, reconociendo el invierno como una estación crítica de riesgo. Los desafíos que ya enfrentan las bases científicas bien equipadas debido al calentamiento a mediados del invierno subrayan la enorme presión que esto podría ejercer sobre las comunidades indígenas remotas del Ártico, su infraestructura, transporte y respuestas de emergencia.
Las inesperadas condiciones durante el trabajo de campo, incluida la fina y fangosa nieve que dificultó el acceso de las motos de nieve a los sitios de campo, obligaron a los investigadores a reconsiderar cómo e incluso si pueden continuar con la ciencia invernal como de costumbre. Esto también plantea nuevos problemas de seguridad, incluidos los esfuerzos de rescate y la capacidad de los investigadores de retirarse rápidamente a la seguridad de la estación de investigación si se encuentran con osos polares mientras trabajan en el campo.
El comentario, titulado "El calentamiento invernal de Svalbard está llegando al punto de fusión", sirve como un duro recordatorio del ritmo acelerado del cambio climático en el Ártico, enfatizando que estas anomalías son, de hecho, la nueva realidad del Ártico.
Comentario de James Bradley en Nature Communications: Svalbard winter warming is reaching melting point
