La lucha contra el cambio climático comienza en el Mar y los Océanos
En la Asamblea General de las Naciones Unidas, la Unión Mundial para la Naturaleza (UICN), la única organización de conservación con estatus oficial de observador en la ONU, hizo un llamamiento a parar el colapso de los océanos para amortiguar los efectos del cambio climático.
Mientras en Bali se desarrollaba el pasado mes de diciembre del 2007 la Conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático, en Nueva York la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) discutió acciones para asegurar el futuro de los océanos.Los océanos son el pilar de la vida sobre la tierra y un elemento crítico para regular el clima del planeta. “Todos dependemos de océanos saludables para vivir y poder hacer frente a los inevitables impactos del cambio climático. Ahora más que nunca necesitamos océanos en buen estado que puedan amortiguar estos efectos”, dijo Carl Gustaf Lundin, Director del Programa Marino Global de la Unión Mundial para la Naturaleza (UICN).
Ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, que conmemora el 25 aniversario de la Convención sobre el Derecho del Mar, la UICN hizo un llamamiento a los Estados a tomar una serie de medidas para frenar el colapso de los océanos, recordando que éstos ofrecen a la humanidad una oportunidad para hacer frente a los impactos del cambio climático.
La primera medida a tomar, hoy en día, es atacar la principal amenaza para los océanos: la pesca mal regulada. “Tenemos ya las herramientas para mejorar el manejo de nuestras pesquerías, reducir la capacidad de pesca y hacer frente a la pesca ilegal” dijo Harlan Cohen, representante de la UICN en las Naciones Unidas. Agregó, que “esto implica que las organizaciones de gestión pesquera deben cambiar su enfoque que, hasta hoy, solo ha prestado atención a las especies objeto de pesca, para avanzar hacia un manejo de todo el ecosistema, tomar en cuenta los impactos que causan los artes de pesca y a las especies que se pescan accidentalmente.”
Incrementar el número de áreas Marinas Protegidas (AMP) dentro y fuera de la jurisdicción de los países, es otra medida importante que la UICN solicita. Las AMP pueden ayudar a lograr océanos más resistentes al cambio climático. Actualmente, solo el 1% de los océanos está bajo alguna figura de protección, muy por debajo de la meta del 10%, establecida por el Convenio de las Naciones Unidas sobre la Diversidad Biológica.
Hoy somos testigos de la implementación de nuevas propuestas que buscan reducir la acumulación de dióxido de carbono en la atmósfera transfiriéndolo al océano, por ejemplo mediante fertilización de los océanos. La UICN pide que se examinen rigurosamente estas propuestas que surgen, ante la urgencia de Comunicado de prensa buscar soluciones frente al cambio climático, para asegurar que su implementación no altere al medio ambiente marino. Los Estados deben asegurarse de que los beneficios, si los hubiera, de la fertilización oceánica para la mitigación del cambio climático, rebasen los riesgos y que ocurra un secuestro de dióxido de carbono real y de largo plazo; que pueda ser medido, verificado y regulado de forma independiente.
En conclusión, la UICN insta a todos los Estados a poner en práctica medidas decididas para mejorar el conocimiento en torno a los océanos, su salud, su valor y su vulnerabilidad, no solamente en las aguas bajo su jurisdicción, sino también en alta mar.
“La necesidad de los Estados de acordar acciones urgentes nunca ha sido más aguda,” dijo Carl Gustaf Lundin. Además, enfatizó en que las “medidas que se tomen en los próximos años determinarán la sostenibilidad futura de los océanos en términos de seguridad alimentaria, sobreviencia de especies y capacidad para soportar el cambio del clima.Resumen de : www.iucn.org
Sobre la Unión Mundial para la Naturaleza (UICN)
Creada en 1948, La Unión Mundial para la Naturaleza (UICN) reúne a 83 Estados, 111 agencias gubernamentales, más de 800 ONG y cerca de 10.000 especialistas y expertos de 148 países en una asociación mundial de carácter único. Como Unión, la Unión busca influenciar, alentar y ayudar a los pueblos de todo el mundo a conservar la integridad y la diversidad de la naturaleza, y a asegurar que todo uso de los recursos naturales sea equitativo y ecológicamente sustentable. La Unión es la red de conocimiento ambiental más grande del mundo y ha ayudado más de 75 países a preparar e implantar estrategias nacionales de conservación de la diversidad biológica.