Debido al deshielo polar, la vida de los fondos marinos se está adaptando al cambio climático
Cuando se trata del cambio climático es raro escuchar alguna buena noticia. Pero un investigador que el 21 de septiembre ha reportado evidencias en la revista de Cell Press, Current Biology (después de más de dos décadas de estudio) nos trae una buena: la pérdida en algunas áreas de hielo marino sobre las aguas antárticas ha llevado al aumento de crecimiento de criaturas que viven en el fondo marino. Esas concentraciones submarinas están actuando como un importante e inesperado sumidero de carbono.
"Fue una sorpresa haber observado vida invisible respondiendo al cambio climático durante más de una década por debajo de uno de los impactos más obviamente visibles del cambio climático: los "azulados polos", dice David Barnes del British Antarctic Survey (BAS). "Hemos encontrado que un área significativa del planeta, de más de tres millones de kilómetros cuadrados, es un gran sumidero de carbono y, más importante, un voto negativo sobre el cambio climático".
De hecho, la mayor parte de las consecuencias conocidas del cambio climático han empeorado las cosas en lugar de mejorarlas. Por ejemplo, dice Barnes, mientras se calienta el clima polar, se derrite el hielo marino. Como el hielo marino se ha derretido, la superficie de la Tierra ha pasado en los polos de ser de un blanco reflexivo a un azul mucho más oscuro, que absorbe más calor y derrite aún más hielo.
Los científicos sabían que los bosques árticos y las nuevas floraciones de algas, donde se derriten las plataformas de hielo, estaban, hasta cierto punto, trabajando contra el cambio climático. Ahora dicen que, en base a estudios de esqueletos de briozoos de la Antártida Occidental (organismos referidos a veces como "animales musgo" que viven en el fondo marino), "podrían ser más importantes que otros organismos" cuando se trata de acumular y enterrar carbono.
La Antártida no ha experimentado una pérdida neta de hielo marino como la que se está produciendo en el Ártico. El hielo se ha derretido sobre las plataformas continentales más productivas mientras que se ha formado hielo sobre aguas menos productivas, más profundas. En el nuevo estudio Barnes y sus colegas recolectaron especímenes de todos los mares de la Antártida Occidental y utilizaron imágenes de alta resolución para el cálculo de la densidad de vida en el fondo del mar.
Los datos, recogidos durante más de 20 años, revelan fuertes aumentos en la producción anual de carbono en las plataformas del lecho marino procedentes de los cuerpos de los briozoos de la Antártida Occidental. Los investigadores calculan que el crecimiento de los briozoos casi se ha duplicado, con animales recogiendo más de dos millones de toneladas de carbono por año desde la década de 1980. La extrapolación de los datos para tener en cuenta otras especies submarinas sugiere una mayor reducción de carbono de aproximadamente 2,9 millones de toneladas por año, lo que equivale a cerca de 50 mil hectáreas de selva tropical. Aún mejor es la sugerencia de que este carbono puede ser más propenso a quedar atrapado y enterrado en el fondo del océano, dada la profundidad de las plataformas polares continentales.
Barnes dice que las sorprendentes diferencias en la cantidad de carbono que se recoge entre las diferentes regiones de la Antártida está vinculada estrechamente a los hielos marinos pérdidos en cada lugar. Aun más noticias alentadoras: encontraron que las Islas Orcadas del Sur - primera Área Marina Protegida de alta mar del mundo - "está justo en un punto de acceso de carbono, sin darnos cuenta!".
Un nuevo crucero científico internacional del BAS al Área Marina Protegida de las Islas Orcadas del Sur a principios de 2016 debería dar a los investigadores una mirada de cerca de porqué es tan importante ese lugar en particular. De manera más general, los hallazgos son un recordatorio de la importancia de la vida en el océano para entender nuestro clima cambiante.
"Se puede ver que los bosques son importantes con respecto al cambio de los ciclos del carbono y el clima, pero dos terceras partes de nuestro planeta son océano, y debajo de ellas la vida que no se puede ver también es muy importante en las respuestas del clima", dice Barnes.
Ahora será importante averiguar si cosas similares están ocurriendo en el Ártico.
Artículo científico: Antarctic sea ice losses drive gains in benthic carbon drawdown