Pueden ser los gigantes durmientes del secuestro global de carbono
Algunos humedales funcionan mejor bajo presión. Un nuevo estudio revela que cuando se enfrentan a la subida del nivel del mar, los humedales costeros responden enterrando aún más carbono en sus suelos.
Los humedales costeros, que incluyen pantanos, manglares y pastos marinos, ya almacenan carbono de manera más eficiente que cualquier otro ecosistema natural, incluidos los bosques. El último estudio, publicado el 7 de marzo en la revista Nature, analizó cómo reaccionan los humedales costeros de todo el mundo a la nubida del nivel del mar y descubrieron que pueden estar a la altura de la ocasión, ofreciendo una protección adicional contra el cambio climático.
"Los científicos saben bastante sobre el carbono almacenado en nuestros humedales de marea locales, pero no teníamos suficientes datos para ver patrones globales", dijo Pat Megonigal, coautor y científico de suelos del Smithsonian Environmental Research Center.
Para obtener una imagen global, los científicos de Australia, China, Sudáfrica y los Estados Unidos reunieron datos de 345 sitios de humedales en seis continentes. Observaron cómo almacenaban carbono esos humedales por hasta 6.000 años y compararon si los niveles del mar subían, bajaban o permanecían prácticamente iguales durante milenios.
Para los humedales que se enfrentaron a mares crecientes, las concentraciones de carbono se duplicaron o casi se cuadruplicaron en solo los 20 centímetros superiores del suelo. Cuando los científicos observaron más profundamente, a una distancia de 50 a 100 centímetros bajo la superficie, la diferencia llegó de cinco a nueve veces mayor.
El almacenamiento adicional se debe a que el carbono agregado a los suelos de los humedales por el crecimiento de las plantas y los sedimentos se entierra más rápido a medida que los humedales se vuelven más húmedos. Atrapados bajo el agua con poco o ningún oxígeno, los detritos orgánicos no se descomponen y liberan dióxido de carbono muy rápido. Y cuanto más se elevan las aguas, existe más espacio de almacenamiento subacuático para que sea enterrado el carbono.
América del Norte y Europa enfrentaron la mayor subida del nivel del mar en los últimos 6.000 años. El derretimiento de los glaciares de la última era glacial hizo que subiesen los niveles de agua, aumentando las inundaciones costeras. Los continentes en el hemisferio sur, en contraste, estaban en gran parte libres de glaciares y experimentaron niveles de mar estables o incluso en descenso.
Sin embargo, la escena está cambiando ahora. La marcha constante del cambio climático está exponiendo incluso los humedales más al sur a una acelerada subida del nivel del mar.
"Pueden ser los gigantes durmientes del secuestro global de carbono", dijo el autor principal Kerrylee Rogers de la Universidad de Wollongong en Australia. La mitad de las marismas del mundo crece a lo largo de las costas del sur de África, Australia, China y Sudamérica.
Si esos humedales duplicaran su secuestro de carbono, como lo hicieron otros humedales en el estudio en respuesta a la subida del nivel del mar, podrían secuestrar otros 5 millones de toneladas de carbono atmosférico cada año. Eso es el equivalente a retirar de la carretera más de un millón de automóviles.
El truco, por supuesto, es asegurarse de que los humedales no se ahoguen y desaparezcan si las aguas suben demasiado rápido.
"La preservación de los humedales costeros es crítica si van a desempeñar un papel en el secuestro de carbono y la mitigación del cambio climático", dijo Rogers.
Para que sobrevivan los humedales costeros, necesitan espacio para migrar hacia el interior. Si tienen suficiente espacio depende en gran medida de cómo priorizan las sociedades muchos objetivos en competencia. Una cosa es segura: si el cambio climático aumenta, los humedales pueden proteger a las personas en más de un sentido, si se les da suficiente espacio para respirar.
Artículo científico: Wetland carbon storage controlled by millennial-scale variation in relative sea-level rise