Investigadores intentan maximizar el crecimiento del alga marina Asparagopsis taxiformis
Las algas marinas pueden ser el súper alimento que el ganado lechero necesita para reducir la cantidad de metano que emiten a la atmósfera.
Lograr que las vacas eructen y suelten menos gases podría ser vital para frenar el calentamiento global. Ahora, los investigadores de la Institución Scripps de Oceanografía en la UC San Diego creen que tienen la solución: las algas marinas.
"Todo el mundo se ríe", dice la investigadora principal Jennifer Smith. "Es un proyecto con el que casi cualquier persona con quien hables puede relacionarse".
Smith está trabajando con investigadores de la UC Davis en un ambicioso proyecto que podría suprimir la producción de metano en las vacas.
"Son la mayor fuente de emisiones de metano en California, desde una perspectiva derivada de los humanos", dice Smith.
Parte del proceso digestivo de la vaca produce metano como un subproducto. Cuando las vacas lo liberan de su cuerpo, entra en la atmósfera.
"El metano es un gas de efecto invernadero mucho peor que el dióxido de carbono en términos de su potencial de calentamiento. Presenta alrededor de 30 veces el potencial de calentamiento que el dióxido de carbono", dice Smith.
Con 5,2 millones de vacas lecheras y de res en todo el estado de California, eliminar todo ese gas podría tener un profundo efecto en el calentamiento global.
A través del estudio, encontraron que un tipo específico de alga marina puede ayudar a eliminar la creación de metano durante la digestión. La planta se llama Asparagopsis taxiformis. Crece en la costa sur de California y alrededor de las islas costeras.
Los investigadores de la UC Davis descubrieron que si mezclan las algas con el alimento de las vacas, reduce la cantidad de metano que liberan. Están estudiando la cantidad de algas con que necesitan ser alimentadas las vacas para tener el mejor efecto. También están investigando qué efectos puede tener en la salud de la vaca y en la carne y los productos lácteos que proporciona.
Mientras tanto, Smith y su equipo en la UC San Diego están tratando de encontrar una manera más eficiente de cultivar Asparagopsis.
"Estamos tratando de ver qué tan rápido podemos hacerlas crecer, cómo podemos manipular cosas como la luz, la temperatura y los nutrientes para maximizar la tasa de crecimiento", dice Smith.
También están tratando de ver si pueden cultivar una forma más concentrada de Asparagopsis, para reducir la huella de carbono producida y enviarla a las granjas.
"Definitivamente es una gran tarea", dice Smith. "Y es algo en lo que estoy súper emocionada de trabajar. Se me pone la piel de gallina cada vez que hablo sobre eso".
Se puede encontrar más información sobre el estudio en el sitio web de Scripps Institution of Oceanography.