Las bacterias que degradan el petróleo juegan un papel vital en la limpieza de los derrames
Un equipo de científicos de la Universidad Heriot-Watt ha creado un observatorio submarino en el canal Faroe-Shetland y descubrió que sus aguas están repletas de bacterias que se alimentan de petróleo y que podrían ayudar a lidiar con futuros derrames de petróleo.
Es el primer observatorio de este tipo en el Atlántico nororiental, una zona con un alto nivel de actividad petrolera, gasífera y marítima.
Aún se desconoce si la abundancia de bacterias que degradan el petróleo es evidencia de una filtración crónica, pero indica que están preparadas y listas para lidiar con explosiones o contaminación de la cercana actividad industrial, dice el Dr. Tony Gutiérrez de la Universidad Heriot-Watt.
"Las bacterias que degradan el petróleo juegan un papel vital en la limpieza de los derrames de petróleo; por ejemplo, las encontramos fuertemente enriquecidas durante el derrame de la Deepwater Horizon. Estos tipos de microbios prosperan en el petróleo como fuente de alimento".
Gutiérrez y su equipo monitorearon durante dos años el agua del canal Faroe-Shetland, a diferentes profundidades y ubicaciones, para establecer una línea de base para los microbios cuando no hay derrames.
"En general, detectamos una abundancia más alta de lo habitual de estas bacterias. Comprenden alrededor del 15-20% de la comunidad total de microbios, cuando muy a menudo se encuentran en menos del 1% de abundancia. No estamos seguros de por qué es así: podría deberse a la filtración natural de petróleo del lecho marino o la liberación de aguas producidas por las plataformas petrolíferas".
"Es fundamental establecer una línea de base en estas aguas para que podamos monitorear el impacto de futuros derrames y el éxito de cualquier trabajo de limpieza, así como otros problemas como la acidificación y el calentamiento de los océanos".
Imagen: Mapa del canal de las Islas Feroe Shetland que muestra una vista aérea, incluidas las líneas batimétricas, una representación esquemática de la dirección del flujo de la masa de agua y estaciones de muestreo. Los lugares de muestreo para el perfil microbiano de la línea base están marcados con estrellas amarillas.
El equipo planea extender su monitoreo en el canal Faroe-Shetland y espera comprender mejor por qué estos tipos de bacterias se encuentran en una abundancia tan atípicamente alta.
También tienen en mente otras ubicaciones para observatorios similares.
"La creación de observatorios microbianos en otras regiones oceánicas con riesgo potencial de contaminación y efectos del cambio climático, como el Ártico, es uno de nuestros objetivos", dijo Gutiérrez.
La investigación fue financiada por la Royal Society, la Society for Applied Microbiology y la Marine Alliance for Science and Technology for Scotland (MASTS).
La investigación se publicó en mBio, una revista de la Sociedad Estadounidense de Microbiología: Inter- and Intra-Annual Bacterioplankton Community Patterns in a Deepwater Sub-Arctic Region: Persistent High Background Abundance of Putative Oil Degraders