Una investigación cuantifica cuánto microplástico se emite a la atmósfera por la espuma marina
Un nuevo estudio cuantifica la cantidad de microplástico exportado a la atmósfera a partir de la espuma marina. Cuando las burbujas estallan en la superficie del mar, pequeñas partículas, como sal o trozos de materia orgánica, pueden ser lanzadas al aire.
Este proceso mueve cantidades significativas de materia, suficiente para afectar la dinámica climática global al influir en el equilibrio radiativo de la atmósfera y servir como núcleos de condensación de nubes. Pero, ¿Puede la espuma marina arrojar también a la microplásticos atmósfera, que ahora son omnipresentes en el océano?
Luc Deike, líder del equipo de investigación y profesor asociado de ingeniería mecánica y aeroespacial y del Instituto Ambiental High Meadows y sus colegas de las Universidades de Princeton y Cornell, exploraron los procesos físicos detrás de la eyección de microplástico al estallar burbujas en experimentos de laboratorio utilizando fotografía de alta velocidad.
Los autores demuestran que las partículas de microplástico con diámetros de 10 μm a 280 μm son transportadas fuera del agua de mar al aire mediante pequeñas gotas conocidas como "gotas de chorro" que son expulsadas por una burbuja de espuma marina que estalla.
Imagen: Bosquejo de los procesos relevantes que expulsan microplásticos del océano adaptado de Refs.
Estas pequeñas gotas se elevan por el aire con su carga de plástico. Una vez en el aire, el agua puede evaporarse, dejando el plástico en el aire con las corrientes de viento. Utilizando estimaciones de la concentración de microplásticos en el mar, se puede estimar la cantidad total de microplásticos emitidos por los mares del mundo.
Los autores calculan que cada año el océano emite entre 0,02 y 7,4 Mt de plástico (con una estimación aproximada de 0,1 Mt de plástico). Según los autores, ahora se necesitan inventarios de las concentraciones de microplásticos oceánicos para reducir las incertidumbres en la cuantificación de las emisiones oceánicas de microplásticos.
"El proceso que observamos es el mismo que ocurre en un vaso de agua con gas", dijo Daniel Shaw, autor principal del estudio y ex estudiante de posgrado en el laboratorio de Deike. "Si acercaras el ojo al cristal, verías un montón de burbujas estallando lanzando estas gotas sorprendentemente alto en el aire. En este caso, sin embargo, esas gotas llevan consigo microplásticos".
Los investigadores registraron hasta más de cien trozos de plástico en una sola gota, aunque observaron que algunas de las concentraciones de microplásticos en su experimento eran mucho más altas que la concentración estimada en los océanos del mundo. Sin embargo, Shaw dijo que, dado el enorme tamaño del océano y la alta frecuencia de las olas rompientes, la cantidad de microplásticos emitidos a la atmósfera desde el océano puede acumularse rápidamente.
"Incluso con una concentración relativamente baja de microplásticos (digamos, sólo uno o dos trozos de microplástico por metro cúbico en la superficie del océano), cuando imaginas cómo las olas chocan constantemente en el océano, formando cada una innumerables burbujas, hay muchas posibilidades de que cada pieza que quede en la superficie eventualmente será expulsada en forma de gota", dijo Shaw.
Una vez que abandonan la superficie del océano, los investigadores dijeron que los vientos superficiales pueden transportar microplásticos a altas alturas de la atmósfera y posteriormente transportarlos a largas distancias. De hecho, Deike dijo que uno de los factores que motivaron el trabajo de su equipo fue la evidencia reciente de microplásticos en áreas remotas, desde algas en el hielo marino del Ártico hasta ventisqueros en la Antártida.
Sus hallazgos han sido publicados en PNAS Nexus: Ocean emission of microplastic
