Reunión del Comité Intergubernamental de Negociación sobre la Contaminación por Plásticos
El 2 de marzo de 2022, los delegados de la Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente adoptaron una ambiciosa resolución para desarrollar el texto de un nuevo tratado para fines de 2024 para poner fin a la contaminación plástica incluso en el medio marino.
Con 24 días completados de negociación formal entre casi 200 países, repartidos en reuniones en Perú, Francia, Kenia y Canadá, la quinta y última reunión de negociación está por realizarse en Busan, Corea del Sur, desde mañana 24 de noviembre al 5 de diciembre de 2024. Es un momento decisivo. Hay que llegar a un acuerdo o se podría perder la oportunidad de adoptar medidas globales para abordar la contaminación por plásticos.
"Durante la última década, he estudiado las medidas internacionales para abordar la contaminación por plásticos. Durante este tiempo, he sido testigo de un notable crecimiento de los desechos plásticos: se calcula que se desechan 400 millones de toneladas al año. La contaminación por plásticos es ahora omnipresente", dice Eteve Fletcher, profesor de Política y Economía Oceánica de la Universidad de Portsmouth.
La cuestión de la contaminación plástica ha cobrado relevancia en la agenda pública y política de una manera que pocos podrían haber previsto. La acción global siempre ha sido la pieza faltante del panorama, ya que la economía del plástico trasciende las fronteras nacionales y las acciones en una jurisdicción, si bien son beneficiosas a nivel local, tienden a no abordar los patrones globales de contaminación.
Para hacer frente a la contaminación por plásticos, es necesario un cambio en toda la economía de los plásticos, que debería centrarse en los sistemas de reutilización y recarga, que reducen la necesidad de nuevos productos plásticos y la sustitución de los plásticos por otros materiales menos contaminantes o nocivos.
Con su equipo de investigadores de políticas, Fletcher ha asistido como observador a las últimas tres reuniones de negociación del tratado sobre plásticos para evaluar el progreso hacia un tratado global. En su mayor parte, el progreso ha sido lento, en gran medida debido a las tácticas dilatorias y de bloqueo de unos pocos países que dependen de las industrias de combustibles fósiles. La presión ejercida por la industria petroquímica sigue frustrando los avances. Dado el ajustado plazo para aprobar el tratado, a Fletcher le preocupa que no se llegue a ningún acuerdo.
Imagen: Sesiones del Comité Intergubernamental de Negociación sobre Contaminación por Plásticos (CIN), en Ottawa (Canadá) en abril de 2024
Tres prioridades
Las negociaciones finales deben incluir tres aspectos.
Una prioridad inmediata es acordar las reglas que rigen la toma de decisiones en las negociaciones entre los Estados miembros, conocidas como "reglas de procedimiento". En la actualidad, las decisiones se toman por consenso, lo que significa que todas las delegaciones deben estar de acuerdo antes de tomar una decisión.
Dadas las posiciones arraigadas de algunos países, es poco probable que la toma de decisiones basada en el consenso produzca un acuerdo rápido porque están muy alejadas las posiciones de algunas naciones. Las reglas de procedimiento deben incluir un mecanismo de votación, de modo que cuando haya un acuerdo decisivo entre la mayoría de las naciones, se pueda tomar una decisión y lograr avances, cuando no se pueda alcanzar el consenso.
La segunda cuestión crítica es la financiera. La contaminación por plásticos es un problema que afrontan con mayor intensidad los países de bajos y medios ingresos. Es probable que el tratado sobre plásticos solo sea eficaz si hay fondos suficientes para que puedan tomar medidas los países más afectados por la contaminación por plásticos.
Como se ha visto en el debate sobre el clima, la financiación es un tema sumamente polémico y plantea cuestiones críticas, como quién pagará por los problemas que ya ha causado la contaminación por plásticos y las nuevas medidas para abordarla, además de cómo los países que apoyan pueden proporcionar la tecnología y la formación necesarias.
Imagen derecha: Quinta sesión del Comité Intergubernamental de Negociación para elaborar un instrumento internacional jurídicamente vinculante sobre la contaminación por plásticos, incluso en el medio marino (INC-5). Foto IUCN
El papel del sector privado también es importante en la economía de los plásticos, y se están llevando a cabo debates sobre opciones innovadoras de financiación privada para apoyar la implementación del tratado. Para que el tratado sea creíble, es esencial llegar a un acuerdo sobre los términos generales de un mecanismo de financiamiento para su implementación.
El tratado también debe centrarse en las medidas que tengan más probabilidades de reducir la contaminación por plásticos. Hay pruebas claras de que reducir la producción de polímeros plásticos primarios reduce la contaminación por plásticos de forma más eficiente y eficaz.
El plástico se produce a tal ritmo que resulta imposible que los sistemas de gestión de residuos puedan seguir el ritmo. Por ello, un tratado centrado en la gestión de residuos no reducirá la contaminación por plástico de forma significativa. Solo frenando la producción de plástico se podrá detener la avalancha de residuos plásticos.
Por supuesto, hay muchos otros elementos importantes que deben acordarse durante las negociaciones. Es necesario establecer criterios para identificar los plásticos problemáticos, innecesarios y evitables que las empresas deberían dejar de fabricar. Los plásticos problemáticos tienen efectos nocivos para la salud humana y el medio ambiente, por lo que cualquier sustancia química preocupante debe eliminarse de los materiales y productos plásticos. Los plásticos innecesarios son aquellos que tienen una función que se considera no esencial, mientras que los plásticos evitables tienen una función esencial pero podrían reemplazarse por una alternativa no plástica.
Es necesario eliminar los subsidios a los plásticos vírgenes que hacen que los productos de un solo uso resulten tan atractivos económicamente. Cualquier cambio en la economía de los plásticos que genere este tratado también debe beneficiar a los trabajadores del sector informal de los residuos.
Esta próxima semana es crucial para la relación del mundo con los plásticos. Las personas y el planeta dependen de ello.
