El término medicán es adecuado como calco del término inglés medicane (de Mediterranean y hurricane)
La borrasca Blas ha acumulado en algunos puntos de las Islas Baleares hasta 180 litros por metro cuadrado y vientos de 137 km/h.
Considerada un ciclón tropical mediterráneo, un fenómeno meteorológico que se da con escasa frecuencia en el Mar Mediterráneo pero que este año ya ha habido otro, Rolf, en regiones del sur de Francia y el noroeste de Italia, y que se prevén más frecuentes debido al calentamiento.
Algunos medios utilizan para denominarla el término medicane (derivado de las palabras inglesas Mediterranean hurricane), pero la Real Academia Española de la lengua explica en su cuenta de Twitter, el término medicán, plural medicanes (a partir de mediterráneo y huracán) es adecuado como calco del término inglés medicane (de Mediterranean y hurricane), empleado para referirse, en general, "a los ciclones mediterráneos que presentan características tropicales", como se indica en el glosario meteorológico de la Agencia Estatal de Meteorología.
"Son igualmente válidas las expresiones descriptivas ciclón tropical mediterráneo y huracán mediterráneo."
"De manera que sería preferible escribir "Temporal atípico en España: posible formación de un medicán", "El medicán se podría desarrollar en una zona triangulada por Baleares, Sicilia y el norte de Argelia" y "Ciclón mediterráneo al suroeste de Baleares, ¿Medicán a la vista?".
La RAE también recuerda "que si se desea utilizar el anglicismo, lo adecuado es hacerlo en cursiva o entrecomillado cuando no se dispone de este tipo de letra".
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— AEMET (@AEMET_Esp) November 10, 2021
A finales de este siglo los medicanes serán más peligrosos, con vientos más fuertes y más lluvias
Una investigación realizada en 2019 por científicos de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) en colaboración con la Universidad de Princeton y el Laboratorio de Dinámica de Fluidos Geofísicos (NOAA) de Estados Unidos, prevé que, hacia finales de este siglo y principalmente en otoño, habrá huracanes más severos en el Mediterráneo, con fuertes vientos y lluvias, que supondrían "un grave riesgo para las zonas densamente pobladas de las costas".
"Los medicanes surgen de las típicas borrascas, que al llegar o cuando se forman en el Mediterráneo se vuelven especiales y empiezan a adquirir ciertos rasgos tropicales, es decir, empiezan a parecerse a ciclones tropicales, y algunos de ellos, en etapa de desarrollo, incluso parecen huracanes, aunque no son tan intensos, duran menos y son de menor tamaño", explicó el geofísico Juan Jesús González Alemán de la UCLM.
"Normalmente son vientos en la categoría de tormenta tropical y muy pocas veces llegan a los huracanes de categoría uno. También suelen estar asociados a precipitaciones intensas y un mar embravecido", añadió
La principal conclusión que se extrae de la investigación es que hacia finales de este siglo y, principalmente en otoño, los huracanes mediterráneos o medicanes, a pesar de ser menos frecuentes, "serán potencialmente más peligrosos, con vientos más fuertes y más lluvias". Por tanto, de continuar el calentamiento global, "se incrementarán los riesgos vinculados a los medicanes, con posibles consecuencias naturales y socioeconómicas".
La investigación de González Alemán se publicó en Geophysical Research Letters: Potential Increase in Hazard From Mediterranean Hurricane Activity With Global Warming
