Futuro sombrío para el atún rojo, ICCAT recorta marginalmente las cuotas de captura
Comunicado de WWF tras la reunión de 10 días de ICCAT en París
Países más influyentes se apartaron de sus compromisos de asegurar una ordenación sostenible de la pesquería
"Deliberadamente ciegos", los miembros de la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (ICCAT por su singlas en inglés) han dejado que el atún rojo del Mediterráneo continúe en una trayectoria de colapso, dijo WWF tras la reunión anual de la comisión que se cerró en París esta tarde con un recorte marginal de las cuotas de pesca.
Con más de cuatro décadas de fracaso en la protección de las pesquerías de atún rojo bajo su cuidado, hoy la ICCAT acordó recortar las cuotas de capturas en sólo 600 toneladas (de 13.500 a 12.900), frente a las más de 6.000 toneladas necesarias para, simplemente, igualar las probabilidades de salvar la especie.
"La codicia y la mala administración han tomado prioridad sobre la sostenibilidad y el sentido común en esta reunión de ICCAT en lo que respecta al atún rojo del Atlántico. Esta reducción miserable de las cuotas es insuficiente para garantizar la recuperación del atún rojo en el Mediterráneo", dijo el Dr. Sergi Tudela, responsable del programa de pesca de WWF en el Mediterráneo.
Los países más influyentes se apartaron de sus compromisos de asegurar una ordenación sostenible de la pesquería (si se aparta un punto importante: la reunión se negó a firmar otra amnistía a las naciones pesqueras exigida por las normas de la ICCAT para pagar la sobrepesca del pasado contra las capturas futuras [caso de Francia]).
El "Compromiso de Doha" promete llegar a nada
El denominado "Compromiso de Doha", que fue hecho por los principales Estados miembros de ICCAT, incluyendo a la UE, Japón y los EE.UU., era clave para el mercado del atún después de que Japón liderase una votación en contra de las propuestas de introducir el mayor nivel de restricciones al comercio de atún rojo en la reunión de marzo de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas (CITES).
Este resultado de la reunión de París recuerda las acciones de ICCAT en la década de 1990, donde las promesas y concesiones de capturas se realizaron frente a la amenaza de remitir el colapso del atún rojo del Atlántico oeste del CITES, sólo para ser seguido por una línea dura en la reducción de las capturas una vez que el peligro de referencia para la CITES había pasado.
Bajo la presión de la industria de la pesca en el Mediterráneo y los países beneficiarios del comercio altamente rentable de atún rojo, especie favorita para el "sushi", la ICCAT tampoco ha realizado ningún otro esfuerzo para regular la pesca en el Mediterráneo, donde la población oriental de atún rojo del Atlántico migra a desovar.
"Después de años de observar un sinnúmero de oportunidades que ha tenido la ICCAT de hacer las cosas bien, está claro para nosotros que los intereses de la comisión no se encuentran en el aprovechamiento sostenible del atún rojo, si no en complacer a intereses comerciales a corto plazo", dijo el Dr. Tudela. "Había que haber implementado aquí medidas efectivas para hacer frente a la pesca ilegal generalizada declarada y no reglamentada de atún rojo en el Mediterráneo ".
Investigaciones recientes han demostrado los altos niveles de incumplimiento que todavía abundan en la pesquería de atún rojo del Mediterráneo. Y, aunque hay observadores de ICCAT en los buques, existen grandes dudas sobre su trabajo. Las medidas de control no han mejorado significativamente en la reunión de París de ICCAT.
"Los miembros de ICCAT son voluntariamente ciegos al hecho de que no reducir las cuotas de pesca a los niveles de precaución lógica recomendadas por la ciencia, esto dará lugar a la falta de recuperación de la especie. Antes de esta reunión de ICCAT, WWF preguntó si querían seguir siendo ineficaces o ayudar a salvar el atún rojo. Aquí está la respuesta más clara", dijo Tudela.
WWF/Adena aprueba la decisión de respetar finalmente las llamadas "normas de amortización", lo que significa que los países que han sobreexplotado verían reducidas sus cuotas en el futuro para compensar. Esta aplicación de las normas de pesca es fundamental en Europa en un momento en que la UE está reformando su política pesquera común y se ha comprometido a escuchar a la ciencia y perseguir la pesca ilegal.
En 2007, Francia pescó más de 10.000 toneladas, mientras que en 2011 su cuota será inferior a 1,000 después de la amortización. En 2011 el contingente de Francia se repartirá entre las flotas artesanales en lugar de a los buques atuneros cerqueros industriales que son responsables de la sobrepesca masiva en el pasado reciente.
WWF insta a que las medidas de reducción de la capacidad puestas en marcha también se centren en la reducción de los cerqueros. Las nuevas normas establecen que dentro de tres años la capacidad de los barcos en el Mediterráneo, en la actualidad demasiado alta, debe estar de acuerdo con las cuotas de pesca. Si bien las cifras actuales para el número de barcos subestiman la capacidad real, este es un paso positivo.
A su llegada a la reunión, el presidente de la ICCAT, Dr. Fabio Hazin, habló de "la obligación de respetar la ciencia" y expresó su "confianza y optimismo" en que los países "actúen con responsabilidad y adopten las medidas necesarias para garantizar la sostenibilidad" de las poblaciones de peces". Pero los países miembros de la CICAA no han estado a la altura de esta expectativa.
"Todo el mundo hablaba de respetar la ciencia y el deseo de adoptar medidas para garantizar la recuperación del atún rojo en el Mediterráneo, pero las medidas adoptadas hoy son de alto riesgo dada la situación desesperada de las poblaciones de atún rojo y todos los espacios en blanco desconocidos en la recolección de datos y análisis actuales", dijo el Dr. Tudela, de WWF.
ICCAT no se ha implicado durante años en la recuperación y gestión sostenible de la pesquería de atún rojo en el Mediterráneo.
WWF/Adena, observador en las negociaciones durante la reunión de ICCAT, pide a los gobiernos que pongan fin al régimen de permisión e impunidad de la pesca ilegal, instando al organismo intergubernamental a poner en práctica un plan de gestión de base científica que permita que el atún rojo del Atlántico se recupere.
WWF también pidió la creación de santuarios de pesca en las seis zonas identificadas de desove en el mar Mediterráneo, pero esta sugerencia fue retirada por completo de la orden del día.
Una propuesta para prohibir el comercio internacional de atún rojo del Atlántico en la reunión sobre la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas (CITES) fue derrotado en Doha, Qatar, en marzo pasado. Pero los países consumidores de atún rojo del Atlántico, la Unión Europea y Japón, así como Noruega Canadá, y EE.UU., se comprometieron a la ordenación pesquera sostenible y adoptar medidas basadas en la ciencia en la reunión de ICCAT de este año.
Japón, en particular, se opuso a su inclusión en la CITES y destacó que el lugar para la gestión sostenible del atún rojo del Atlántico era la ICCAT, y que los países mostrarían al mundo en la ICCAT que eran capaces de asegurar la recuperación de la especie.
"WWF está decepcionada de que los compromisos de Doha no se hayan respetado aquí, en París. Teníamos grandes esperanzas de que, Japón especialmente, tomaría el liderazgo en esta reunión de ICCAT con la puesta en marcha de medidas de gestión sostenible y de seguridad para el atún rojo, así como exigir el cumplimiento estricto", dijo el Dr. Aiko Yamauchi, responsable de Pesca de WWF-Japón. "Los resultados están a la altura de nuestras expectativas, a pesar de las nuevas pruebas de que las normas se incumplen generalizadamente. Estamos instando a Japón a cumplir estrictamente las normas de condicionalidad".
La próxima evaluación de los científicos de ICCAT de las poblaciones de atún rojo en el Atlántico oriental será en 2012, cuando la actual incertidumbre en los datos sea más precisa, y garantizar que las recomendaciones sean consideradas en las votaciones. La calidad de los datos debe mejorar, como también las metodologías empleadas para analizar las cifras. WWF trabajará con los científicos para optimizar el proceso durante los próximos dos años.
Enlace: WWF Adena
