La pesca puede ayudar a las comunidades a recuperarse de eventos extremos, si las flotas extranjeras no interfieren
Dyhia Belhabib nació en 1984, siete años antes del inicio de la "Década Negra" de Argelia, una cruel guerra civil que se cobró la vida de 200.000 personas. Creció en Tazmalt, una ciudad argelina a menos de 100 kilómetros del Mediterráneo, pero la constante violencia y los toques de queda impuestos por el gobierno prohibieron las salidas al océano. Todos los días traían noticias de explosiones y decapitaciones. "Francamente, fue una película de terror", dice ella.