1.000 kilos de peces "cautivos" ceremonialmente liberados al río, capturados con redes aguas abajo
Un acto religioso el miércoles en la ribera del Río Amarillo Jinan, en China, llamado "liberando vidas a la libertad", acabó siendo una terrible equivocación, cuando un grupo de personas liberaron en el agua unas 800 carpas en cautiverio sólo para que fuesen inmediatamente capturadas 100 metros aguas abajo por más de 50 hombres oportunistas que esperaban con redes.
El grupo de 20 personas en la orilla parece que estaba tomando parte en un acto de fe budista, cuando lanzaron casi mil kilos de peces al río Amarillo, informa el New York Times:
En el "fangsheng", o "vida en libertad", los creyentes recogen a los animales en cautiverio y los liberan en el medio ambiente natural. De acuerdo con el intelectual chino Lin Yutang, las tortugas son liberadas a menudo en los ríos o lagos para orar por la longevidad y los peces por la iluminación. Las aves se liberan en el aire. Otros informes dijeron que el acto era para "reponer" el río con las carpas.
Fotos que revelan la liberación y la captura inmediata de los peces tentadoramente cerca de su liberación han estado han sido publicadas por todas partes desde Weibo a la CNTV. Noticias sarcásticas dicen que los liberadores habían traído camiones "para llevar los peces a la libertad, y los colectores para llevarlos de vuelta a la cautividad".
"Nuestra gente es así", dijo un internauta chino cuyo post ha obtenido más de 2.500 recomendaciones.
A principios de este año apareció una masa alarmante de peces muertos flotando a lo largo del estanque artificial de Sijing en el distrito de Songjiang de Shanghai. Se cree que fue el resultado de seguidores budistas que buscaban una iluminación similar. En ese caso, los peces habían muerto porque muchos fueron liberados juntos en el agua.
Según los funcionarios, muchas personas gastan varios cientos a miles de yuanes para comprar peces en los mercados y liberarles en las vías fluviales cercanas.
En 2012 los fieles budistas provocaron un caos cuando lanzaron un millar de serpientes en el medio natural en zonas rurales de la provincia de Hebei.