Puede comerse 9 guppies en un lapso de 5 días
La mayoría de las mantis religiosas comen insectos. Ocasionalmente, las mantis se ven depredando tipos de menú más exóticos: aves, pequeños anfibios y reptiles, incluso ratones. Según una nueva investigación, también pueden pescar peces.
En un nuevo artículo publicado el jueves en el Journal of Orthoptera Research, los científicos describieron por primera vez la evidencia del consumo de pescado por parte de una mantis religiosa.
Según el estudio, los científicos observaron a un solo macho adulto acosando, atrapando y comiendo guppies en un estanque de jardín en Karnataka, India.
"Para alcanzar a su presa, el insecto caminaría sobre las hojas de nenúfares y repollos que crecen en la superficie del estanque", escribieron los investigadores en un comunicado de prensa.
Aunque ha habido evidencia anecdótica significativa de comportamientos inusuales de búsqueda y alimentación de mántides, la documentación científica ha sido difícil de conseguir. El último descubrimiento da crédito a las anécdotas del pasado.
"Este caso confirma que en su hábitat natural, las mantis pueden y se alimentan de vertebrados, incluso de peces", escribieron los científicos en su nuevo artículo.
Según el estudio, las observaciones también ofrecen pruebas de que una sola mantis puede alterar un ecosistema. Los investigadores observaron que las mantis comieron 9 de 22 guppies del estanque en un lapso de cinco días. Los guppies se alimentan de insectos acuáticos. Con la introducción de un nuevo depredador, el equilibrio ecológico puede cambiar.
El descubrimiento también puede ofrecer una nueva visión de las capacidades visuales de las mantis. Los ojos de la mantis pudieron rastrear peces por la noche y explican la refracción del agua de la luz.
Finalmente, los científicos argumentaron que la naturaleza repetida del comportamiento de pesca de las mantis "sugiere la posibilidad de que el insecto haya aprendido de la experiencia dónde y qué cazar".
Artículo científico: The fishing mantid: predation on fish as a new adaptive strategy for praying mantids (Insecta: Mantodea)