Antigua casa de Postas del Siglo XVII
El Restaurante más antiguo de la Comunidad Valenciana

Siempre que voy de Madrid a Peñíscola, o viceversa, suelo detenerme, incluso antes de la construcción de la autovía cuando la antigua carretera general pasaba a unos metros, en este lugar: Venta L'Home (Buñol-Valencia), para hacer un pequeño descanso, tomar un café o una cervecita con alguna tapa. Nunca he llegado a sentarme a comer, lo más alguna ración de ajoarriero o bacalao desmigao, la próxima vez que viaje lo haré sin duda.
Y también siempre me he dicho mentalmente antes de salir: Ese lugar tiene algo y me da buena suerte en estos viajes y paraba por ello. ¿Superstición? Yo no creo en las brujas, pero haberlas haylas...
Y es que la única vez que no he parado en estos muchos años de idas y venidas, está última el día 3 de octubre que iba muy bien de tiempo y me dije: lo hago de un tirón, ha sido la primera vez que he tenido un incidente en la carretera, un reventón de una rueda adelantando a un camión. No pasó nada, solo la rueda hecha migas...como el bacalao.

La ruta original de Madrid a Valencia era el antiguo camino real y contaba con dieciseis casas de postas, estaciones con parada y fonda donde se cambiaban las caballerizas y se ofrecía comida y reposo a los viajeros, aunque en el caso de Venta L'Home no disponen de habitaciones.

La construcción consta de una chimenea central en forma de cono que supone el punto principal de encuentro alrededor del fuego, que siempre encienden en invierno y ellos dicen en homenaje a todos los asados, ahumados y guisos a lo largo de cuatro siglos, y como recuerdo a los históricos fogones que han hecho posible la muy rica y variada cocina tradicional valenciana con sus ollas, arroces y gazpachos. El lugar es encantador, silencioso y relajante, con una suave penumbra que al entrar en verano te parece que esté a oscuras pero a los pocos minutos te acostumbras y empiezas a ver los miles de detalles, todos muy antiguos, que tiene su decoración.
La carta es variada y pasa por la caza -javalí,venado-, arroz meloso, primeros de verduras del bosque -espárragos, setas-, pescados del Mediterráneo o pollitos y pichones criados por ellos mismos. Tienen un menú degustación a 30€.

En su amplio entorno natural exterior tienen piscina, juegos para niños y un "valle ecológico" con granja de animales con patos, gansos, gallos y gallinas, burros, cabras, hasta una pequeña avestruz.
La cabra debe estar acostumbrada a posar para los fotógrafos pues durante la vuelta que di al corral cuando hice estas fotos, a la ida, no me perdió cara en ningún momento, así como está, subida en la tinaja.
Desde luego si se pasa cerca de allí es, como digo, obligatorio parar, por el sitio...
y por la suerte.
Me ha resultado imposible encontrar en internet una historia más o menos oficial de las casas de postas, este texto del 26/11/2005 escrito por Eduardo AG Era en Diario de Córdoba es, sin lugar a dudas, excelente.
El correo de postas reglado fue establecido en España en 1518 por Cédula Real de 28 de agosto por orden de la reina doña Juana -la loca- y su hijo Carlos I . En realidad las postas habían comenzado a funcionar en nuestro país en tiempos de los Reyes Católicos, coetáneo a los instituidos por Luis XI en Francia, siendo ambos pioneros en este tipo de organización en la Europa del siglo XV y, por ello, en el mundo (en Inglaterra se instituyó a partir de 1660, y de 1688 en Alemania). La puesta en marcha de la citada Cédula Real propició el desarrollo de una serie de rutas postales, con las consiguientes apariciones de casas de postas, dotadas del personal y equipamiento correspondientes, las cuales siempre fueron protegidas por el Gobierno real y que se extendieron rápidamente por la geografía peninsular para conectar la mayoría de las ciudades del reino.

El mapa de postas de España estaba diseñado mediante casas que distaban jornadas de 3 a 5 leguas (una legua, la mayor medida itineraria, se computaba por una hora de camino a "paso llano" (a caballo se entiende), y también se contabilizaba por 7.600 varas castellanas: la vara estaba compuesta por tres pies (juntos), que Alfonso XI hizo guardar su marco o padrón en el Archivo de la ciudad de Burgos para que todo el reino se ajustase a esta medida), estableciéndose estas postas en rutas que conectaban Madrid con las principales ciudades periféricas y otras de travesías de menor recorrido que comunicaban con las rutas principales.
Autovía Madrid-Valencia Km 311 (salida Ventamina) - BUñOL (Valencia)