La vista panorámica aquí es absolutamente impresionante, una combinación de vasto océano y terreno accidentado
Guiando buques y gente de mar internacional que pasa a lo largo del Mar del Oeste de Filipinas por cerca de 107 años, el Faro de Cabo Bolinao sigue en pie con orgullo en la cima de Punta Piedra Point de Patar, Bolinao, en la provincia de Pangasinan. Situado a 76.2m sobre el nivel del mar, es el segundo faro más alto del país junto al Faro de Cabo Bojeador que se encuentra en la Región de Ilocos.
Construido en 1905 por ingenieros filipinos, británicos y estadounidenses, ha resistido proverbialmente la prueba del tiempo. Y al igual que algunas balizas y faros que dejaron de dar luz, el Cabo Bolinao también lo ha experimentado alguna vez en 2004. El faro fue impulsado por queroseno hace más de 80 años. Hoy en día, gracias a la última tecnología de energía verde, se ha convertido a la energía solar.
El faro ha sido incluido en un plan de conservación con un presupuesto de 19 millones de pesos por parte del gobierno de Filipinas. La Guardia Costera de Filipinas (PCG), el único dueño del faro bajo el Programa Adopt-A-Faro, se ha unido con el municipio de Bolinao en un acuerdo para mejorar y conservar el faro. La PCG es responsable del mantenimiento de los equipos mientras que Bolinao es responsable de la conservación de la estructura y los alrededores del faro.
Tomará muchos caballos de fuerza para un vehículo ir hasta este faro o simplemente piernas y huesos fuertes para subir la empinada cuesta de la carretera principal, pero todo ello bien vale la pena. La vista panorámica aquí es absolutamente impresionante, una combinación de vasto océano y terreno accidentado, todo en uno.
También son visibles desde el faro sitios arqueológicos donde se han descubierto objetos desde el siglo XIV al XV, las 1.269 hectáreas de la plantación Cape Bolinao Dendro Thermal Ipil-Ipil, extensas playas de arena blanca (Patar Beach) y arrecifes de coral.
Sin embargo, no es recomendable explorar el faro al mediodía. No habría ningún lugar para refugiarse cuando el sol es abrasador o si está lloviendo. Sólo sigue estando el esquelético marco de la oficina de administración, que fue construida el 22 de marzo de 1968, ni siquiera su techado, después de que fue destruido por el tifón Emong en 2009.
El Faro de Cabo Bolinao sirve tanto como un hito histórico y también un destino de turismo.