Al día siguiente, las festividades comienzan de nuevo, ya que es el año nuevo balinés
Todos los años, hacia finales de marzo, toda la isla de Bali en Indonesia, se detiene. Los vuelos quedan en tierra, las tiendas permanecen cerradas, las calles están desiertas de tráfico y peatones. Todos los residentes se encierran en sus casas y apagan las luces. No se habla, no hay música, no hay entretenimiento. Algunos incluso dejan de comer. Este día se llama Nyepi, el "día del silencio", donde los hindúes devotos meditan y reflexionan.
Los días previos a la festividad sagrada están, en marcado contraste con el ritual, llenos de actividades. Las aldeas y las comunidades construyen grandes esculturas similares a monstruos llamadas "ogoh-ogoh" que representan los malos espíritus. Las esculturas están hechas con un bastidor de bambú envuelto con lienzo y, a veces, de espuma de poliestireno.
Algunas de ellas tienen cerca de 8 metros de altura. Estas desfilan por las calles la noche anterior al día de Nyepi, después de lo cual se queman en los cementerios. Muchas personas también golpean ollas y sartenes levantando un asa y queman antorchas secas de hojas de coco para expulsar a los demonios.
En el día de Nyepi, todo se queda en silencio. Las reglas establecen que no haya hogueras, ni luces electrificadas, ni trabajo, ni viajes, ni juergas. Este período dura 24 horas desde las seis de la mañana. Al día siguiente, las festividades comienzan de nuevo, ya que es el año nuevo balinés. Las familias y los amigos se reúnen para pedir perdón unos a otros y realizar rituales religiosos.
Nyepi tiende a pillar desprevenidos a los turistas, ya que, a diferencia de otras vacaciones que los occidentales podrían haber experimentado, toda la ciudad se cierra durante 24 horas, lo que significa que no hay restaurantes y bares abiertos, ni taxis ni transporte público, y nadie pasea por las calles. Los hoteles generalmente están exentos por necesidad, pero se recomienda a los huéspedes que mantengan los ruidos bajos y las luces tenues. A veces los hoteles bajan las cortinas de las ventanas para mitigar las luces.
Nyepi es realmente un buen momento para experimentar un silencio real, para privarse de este estímulo sensorial constante. Puedes tomare el día libre de todo, ir a nadar a la piscina, si estás en un hotel, o simplemente relajarte y leer un libro.