Produce centelleos de luz que a primera vista parecen destellos de neón
Ubicada en las grietas y hendiduras en los arrecifes de coral frente a la costa de Indonesia, las llamadas almejas eléctricas realizan un espectáculo de luz. Pero a diferencia de muchos animales en el océano que producen su propia luz, un nuevo estudio revela que estos llamativos moluscos capturan y reflejan la luz ambiental.
Presente en todo el Indo-Pacífico, la Ctenoides ales es una llamativa almeja de agua salada con zarcillos de colores y un peculiar talento conocido de largo por los buceadores: Produce centelleos de luz que a primera vista parecen destellos de neón u ondulaciones de electricidad. De ahí su apodo, almeja "eléctrica", o mejillón de fuego.
Lindsey Dougherty, un estudiante graduado en la Universidad de California en Berkeley, encontró por primera vez la almeja durante una inmersión en Indonesia y rápidamente quedó fascinado por ella. Así que decidió dedicar su doctorado para averiguar cómo produce su flash la almeja eléctrica.
El impresionante espectáculo de luces del animal se pensó durante mucho tiempo que era un ejemplo de bioluminiscencia, o la capacidad de un organismo para producir la luz a través de reacciones químicas, hasta que una investigación en la década de 1990 descubrió que en realidad era una cuestión de la dispersión de la luz ambiente.
Dougherty y su equipo encontraron que el efecto de parpadeo era debido a la estructura y composición únicas del labio carnoso de la almeja. Los labios, o en el revestimiento, contienen dos tipos de tejidos distintos que le permiten dispersar la luz ambiente, informaron los investigadores esta semana en el Journal of the Royal Society Interface.
El borde del manto se llena por un lado con esferas de nano-tamaño hechas de sílice, dijo Dougherty. "La sílice es muy raramente utilizada por los animales, pero tiene un alto índice de refracción, lo que hace que sea un gran reflector".
El otro lado del manto es muy bueno en la absorción de la luz, dando lugar a la alternancia, o parpadeo, un efecto de luz cuando los labios se abren y cierran. Los bivalvos son animales filtradores, por lo que sus conchas están constantemente abriéndose y cerrándose con el fin de dejar pasar el agua por sus branquias para recoger comida, explicó Dougherty.
"Los labios de tejido se despliegan hacia atrás y adelante para exponer las dos partes distintas unas dos veces por segundo", explicó. Cuando fueron sorprendidas por un falso depredador en una prueba de laboratorio, por ejemplo, "su velocidad de destello salta hasta cuatro veces por segundo", añadió. Los investigadores estudiaron el fenómeno usando vídeo de alta velocidad y otras herramientas.
La pregunta clave ahora es la razón de porqué las almejas hacen lo que hacen con la luz. Por su parte Dougherty sospecha que los llamativos destellos de la almeja pueden servir de una función de señalización de algún tipo, o para defenderse de los depredadores. "También estamos probando para ver si utilizan la luz para atraer a sus presas o para reclutar a otras a asentarse en las inmediaciones con fines de desove", dijo.
"Es muy interesante pensar en los factores que les lleva al desarrollo de este parpadeo", dijo Dougherty, ya que no hay otros bivalvos que emitan luz de tal manera. "Las almejas eléctricas son bastante especiales".
Artículo científico: A dynamic broadband reflector built from microscopic silica spheres in the ‘disco’ clam